Se certifican los primeros edificios con la versión CES 1.1

Con edificios pertenecientes al Cuerpo de Bomberos de Rancagua y Machalí, se inició en octubre de 2024 la certificación de proyectos con la versión CES 1.1, publicada en 2023.

A poco más de un año de publicado el Manual CES 1.1, en 2024 se certificaron los primeros edificios que usaron esta versión. Se trata de tres proyectos ubicados en la región Libertador General Bernardo O’Higgins: la Reposición 8a Compañía de Bomberos de Rancagua, certificado el 4 de octubre de 2024, con 55 puntos, y la 3a Compañía de Bomberos de Machalí – Edificio y la 3a Compañía de Bomberos de Machalí – Departamento, ambos certificados el 9 de octubre con 59 puntos y 55 puntos, respectivamente.

En los tres proyectos participaron Julio Duarte como asesor CES y Ecosustenta como Entidad Evaluadora, Infra Arquitectura y Construcción Ltda. como arquitectos, en tanto que la unidad técnica corresponde a la Dirección Regional de Arquitectura MOP.

“Parte importante de lo que hemos visto desde la Administración de CES es que esta versión tuvo una muy buena recepción entre los equipos de proyectos, reflejando que la incorporación de estrategia de sustentabilidad ya habían superando el estándar de la versión 1.0, especialmente en lo que se relaciona a la envolvente de los edificios y su relación con demanda y consumo de energía”, señala Hernán Madrid, jefe de CES.

Y añade que “como en todo cambio de versión, se van impulsando ciertas líneas de acción, y en esta versión 1.1 algo que ha quedado en evidencia es que para alcanzar un nivel Destacado de certificación ya no es suficiente tener un muy buen proyecto en Demanda de energía y Confort térmico pasivo, ahora es necesario sumar mayores esfuerzos en otras estrategias”.

Para Julio Duarte, asesor CES de EBP Chile, “fue interesante implementar requerimientos más exigentes en proyectos que habían iniciado su asesoría bajo la versión anterior de la certificación CES. Asimismo, la incorporación de nuevos requerimientos impulsó el diseño de soluciones más eficientes en coordinación con el mandante, logrando mejorar el confort interior de los usuarios y mantener el nivel de certificación”. 

En ese sentido, el principal desafío que enfrentaron fue “incorporar requerimientos que no estaban presentes en la versión anterior de la certificación y que no se habían considerado desde la etapa de diseño. Para superarlo, se trabajó en la actualización de diversos aspectos durante el proceso de obra, enfocándose en soluciones más eficientes, como la optimización del consumo de agua. No obstante, algunos procesos, como el plan de gestión de residuos, ya estaban siendo implementados por iniciativa del mandante, lo que facilitó la adaptación de estos a los nuevos estándares de la certificación CES”, precisó Duarte.