Dirección de Aeropuertos MOP adjudicó licitación para los estudios base CES Aeropuertos

Ferrer y Asociados Ingenieros Consultores en alianza con KIPUS de la Universidad de Talca, se adjudicó licitación para realizar los estudios de la versión CES Aeropuertos.

Con la adjudicación de la licitación comenzó formalmente el desarrollo de la versión CES Aeropuertos. La empresa ganadora es Ferrer y Asociados Ingenieros Consultores (FAIC), que va en conjunto con el Centro Tecnológico Kipus de la Universidad de Talca, dirigido por María Luisa del Campo.

De esta manera, FAIC y Kipus deberán proponer la adaptación los requerimientos de energía, agua y acústica para la versión de aeropuertos. Y en una segunda etapa de la consultoría, deberán evaluar temas no abordados por CES, como la ampliación del alcance de la medición de huella de carbono, incorporando el ciclo de vida completo la edificación, energía neta cera, carbono neto cero, parámetros asociados a economía circular, electromovilidad e incorporación de infraestructura verde y azul.

El miércoles 16 de agosto se adjudicó la licitación por parte de la Dirección de Aeropuertos del Ministerio de Obras Públicas, y el 23 de agosto se realizó la reunión de partida, con la que se dio inicio formal al desarrollo de los estudios. 

Hernán Madrid adelanta que los comités técnicos y consultivos de la versión de Aeropuertos serán convocados e iniciarán su trabajo en octubre. 

CES levanta en terreno las condiciones de infraestructura en Puerto Natales

En conjunto con la Dirección de Aeropuertos del MOP, el jefe de CES pudo verificar las condiciones de funcionamiento de infraestructura sometida a clima extremo, y recabar información para las versiones CES Aeropuertos y CES Hospitales.

Karen Jara, Hernán Madrid y Martita Molina.

Puerto Natales fue la última ciudad visitada por CES. El jefe de la certificación, Hernán Madrid, viajó a principios de julio en conjunto con Martita Molina y Karen Jara, profesionales del equipo de la Dirección de Aeropuertos del Ministerio de Obras Públicas (MOP)

Por una parte, estuvieron en el aeródromo Teniente Julio Gallardo, recinto que está funcionando en condiciones extremas. “Elegimos ir en invierno para ver más claramente la interacción con las condiciones en términos de frío extremo y nieve”, puntualiza Madrid.

Este 2023 el aeródromo es de pequeña escala comenzó a recibir vuelos comerciales de aerolínea durante todo el año, por lo que deberá crecer, para ajustarse a las condiciones de la red primaria del país. 

“El proyecto considera la reutilización del actual terminal de pasajeros las instalaciones de la DGAC y se construirá un nuevo terminal de pasajeros, la torre de control se cambiará de ubicación y se desarrollará un edificio nuevo”, precisa Madrid.

Entonces, este proyecto incorpora algunos de los futuros lineamientos de la versión de aeropuertos, como la reutilización de edificios y, adicionalmente, va a tener un terminal de pasajeros que representará un enorme crecimiento con respecto a las instalaciones actuales, y en una condición climática extrema. “Nosotros fuimos y había nevado recientemente, con una gran cantidad de nieve acumulada, y temperaturas mínimas de -17 y -13 grados. Requiere condiciones especiales de diseño como el manejo de la nieve, del clima frío en términos del acceso de las personas, el acceso de equipaje”, detalla.

Otra condición evaluada es que si bien en invierno pueden acumular una gran cantidad de nieve, en verano, las temperaturas son del orden de 25 a 26 grados algunos días, por lo que si no se incorpora adecuadamente esta condición en diseño se va a producir sobrecalentamiento, esto sumado al cambio climático que ha ido elevando las temperaturas máximas. 

Este es un aspecto que se ha repetido sobre todo en las regiones de Los Lagos, Aysén y Magallanes. “Tradicionalmente, diseñamos edificios solo con calefacción, sin incorporar aire frío, y con las condiciones de cambio climático que hemos tenido en los últimos años ya se hace presente que dos, tres días, una semana o diez días al año vas a tener condiciones de sobrecalentamiento, por lo que se debe considerar soluciones que hace tres o cinco años atrás eran impensables para estos climas”, explica el profesional.

Infraestructura hospitalaria

Más tarde, pudieron conocer el Hospital Dr. Augusto Essmann de Puerto Natales, que si bien no está certificado con CES, se utilizó como piloto para el desarrollo de la versión CES Hospitales, e incorpora elementos de diseño pasivo y activo, así como estrategias de eficiencia energética dentro de su desarrollo. “Nos interesaba ver un edificio de alta complejidad en la misma ciudad y zona climática en la que estará el aeródromo Teniente Julio Gallardo, porque es uno de los primeros proyectos piloto de aeropuerto”, comenta el ingeniero.

Manuel Silva, jefe de Control Centralizado Hospital P. Natales; Martita Molina, Karen Kara y Hernán Madrid.

Dentro de las cosas que más destacan en el recorrido, es que se hacen cargo de la complejidad del edificio con un equipo y sistemas de control muy bien abordados para la envergadura del hospital, es decir, “tienen una sala de control con monitoreo permanente de las características críticas de los equipos, de funcionamiento del edificio, de temperatura, de iluminación y la van controlando con un equipo de personas dedicado a eso”.

“Tienen como un trabajo súper profesional en términos de revisar los sistemas de control específicos y complejos que tiene un edificio de esta envergadura, este es un aspecto muy destacado”, sostiene. 

En diseño pasivo, el edificio incorpora las características del clima. Por ejemplo, “en el hospital no había acumulación de nieve en los techos o en la zona cerca de los muros, había una preocupación del diseño para que al lado de los muros no se acumulara nieve, de manera de que los sistemas de calefacción no tengan un funcionamiento alterado como el que podrían tener al estar en contacto directo con los muros o cubiertas con nieve”, destaca.

Madrid complementa con que “ese tipo de condiciones es un aprendizaje muy valioso para incorporar, tanto en la versión de Aeropuertos como en el proyecto específico del aeródromo de Puerto Natales”.

Asimismo, esta visita al hospital es útil para levantar información sobre el funcionamiento del edificio, que se suma a la obtenida en Curicó, Quillota, Alto Hospicio, para actualizar la versión CES Hospitales.

Viviendas sustentables del futuro ad portas de ser una realidad

Con un importante foco en la eficiencia energética y la economía circular, los proyectos finalistas del Desafío NetZero2030 entran en la etapa final para conocer el prototipo de vivienda social sustentable del Chile del mañana.

Viviendas con “doble piel” para reducir la calefacción artificial, otras configuradas con menos elementos constructivos, espacios comunes y posibilidad de ampliación desde los 52 a los 90 mts2, y otras que aprovechan el aire frío y caliente que se produce en un hogar para la distribución de sus espacios y la calefacción interior, son algunas de las iniciativas finalistas propuestas para convertirse en las viviendas sociales del futuro en el concurso Desafío NetZero 2030.

Dos equipos representantes de la Pontificia Universidad Católica, dos de la Universidad del Desarrollo y uno de la Universidad Autónoma, sede Temuco, son los cinco equipos finalistas que se dieron a conocer en un evento realizado en el edificio de CChC en Temuco. En esta ciudad es donde los participantes debieron desarrollar sus proyectos, considerando las características propias de la zona y el alto índice de contaminación atmosférica que impacta al territorio, buscaron soluciones para el consumo neto de energía, emisiones netas de CO2, industrialización y la economía circular como sus pilares fundamentales.

Al evento asistieron autoridades locales, entre las que se encontraron Nelson Curimir, Seremi de Economía, Fomento y Turismo; Juan Burgos, subdirector de Corfo Araucanía; Patricia Urzúa, la de Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas regional, además de Guillermo Guzmán, arquitecto y académico de la Universidad de Nottingham (UK). También asistieron los representantes de las instituciones de educación que apoyaron el desafío y fueron parte del proyecto Viraliza, junto con los representantes de Construye2025 y el Colegio de Arquitectos, organizadores del concurso.

“Nos hemos encontrado con muy buenas ideas, buenos planteamientos, que consideran las directrices fundamentales del concurso pero, por sobre todo, estudiantes comprometidos y que creen que apuntar, a través de la construcción industrializada, a la carbono neutralidad y consumos netzero ayudarán a construir de una manera mucho más eficiente y sustentable”, expresó Marcos Brito gerente de Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción.

Por su parte, Beatriz Buccicardi , presidenta del Colegio de Arquitectos, añadió que “el Desafío Net Zero 2030 nos permite generar un ecosistema que ayude a los futuros profesionales de la arquitectura, para enfrentar el desafío que nos impone el cambio climático, a la academia para la investigación y los proveedores que deben avanzar hacia materiales cada vez más sustentables y a la industria, que pueda tener profesionales que hagan diseños net zero”, haciendo hincapié en la importancia de esta relación con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de Naciones Unidas.

Los finalistas

Isidora Díaz y Paula Barrios son las capitanas de los dos equipos finalistas representantes de la Universidad del Desarrollo que, junto a Thiare Villagra y Lucas Soler, líderes de los equipos de la Universidad Católica, y Sebastián Maureira, capitán del equipo de la Universidad Autónoma, serán los encargados de entregar los prototipos finales de las viviendas sociales sostenibles que se desarrollarían en la región de La Araucanía. 

Asimismo, el concurso quiso distinguir a dos grupos con el Premio a la Innovación. El primero corresponde al equipo de la Universidad de Santiago, liderado por Javier Carrasco, debido a su propuesta que generaba áreas habitables comunes (como cocina, comedor, estar y logia), dejando los dormitorios en zonas privadas; y el equipo de la Universidad Católica, con Lucas Soler como su capitán, por la pertinencia frente al clima de vivienda continua en subconjuntos con un patio común protegido y de fuente energética y lumínica para el conjunto.

Ahora el concurso entra en su recta final. En noviembre se conocerá al equipo ganador que obtendrá una pasantía en la Universidad de Nottingham (Reino Unido), premio que entregará una experiencia profesional inolvidable a los participantes, mientras que el segundo y tercer lugar obtendrán premios de 1,5 y un millón de pesos, respectivamente. 

Alianza público-privada promoverá la gestión sustentable de los residuos de construcción y demolición en la Región de Los Lagos

Acuerdo de Producción Limpia convoca la participación de todos los actores de la cadena de valor de la industria de la construcción regional, para reducir la generación de residuos e impulsar el uso eficiente de los materiales, evitando su disposición final.

La Región de Los Lagos es la séptima generadora de Residuos de Construcción y Demolición (RCD) a nivel nacional, con un promedio anual de 274 mil toneladas en la última década, y es también una de las siete regiones del país que no cuenta con sitios de disposición legal para los RCD. 

Para proponer soluciones a la falta de sitios de valorización y disposición final de RCD, con enfoque de economía circular, la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Puerto Montt y la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASCC) firmaron un Acuerdo de Producción Limpia (APL) que apoyará a la industria de la construcción regional para avanzar hacia una correcta gestión de los RCD y el uso eficiente de los materiales y del recurso hídrico.  

Este APL es uno de los compromisos establecidos en el “Pacto Región Sustentable e inclusiva Los Lagos”, que está desarrollando el  Gobierno Regional.  

“Hoy el sistema productivo en el mundo tiene desafíos que de verdad, si no somos capaces de analizarlos en la perspectiva de la sostenibilidad territorial, el futuro no está garantizado”, señaló el gobernador regional, Patricio Vallespín, y agregó que “este acuerdo por la producción limpia y gestión de residuos de la construcción y demolición y uso eficiente del agua es una súper buena señal, que significa que no solo se hacen declaraciones, sino que se comprometen acciones y se firman compromisos”.

Por su parte, el subdirector de Producción Sustentable de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, Sebastián Carvallo, indicó que este APL va a priorizar la gestión del negocio y también compromete fuertemente al sector hacia un desarrollo sustentable.

“Fomentar la economía circular en la cadena de valor de la industria a través del uso eficiente de materiales; la prevención, valorización y correcta gestión de residuos, no es tarea sencilla. Comienza aquí un viaje complicado y difícil, pero les puedo decir, con conocimiento de causa, pues la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático ya cuenta con 209 Acuerdos de Producción Limpia, que se puede”, señaló Carvallo.

Con este APL se propiciará un ecosistema de innovación para apoyar la valorización de RCD y el desarrollo de nuevos modelos de negocios circulares, mediante una Mesa de Innovación Regional del Sector Construcción liderada por la  CChC Puerto Montt,  que tendrá la tarea de identificar y difundir instrumentos de fomento, así como el impulso a los cambios normativos. 

Para la presidenta de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Puerto Montt, Francisca Sanz, “este APL es la conclusión del trabajo de más de un año, donde las empresas, la academia y las autoridades regionales se sentaron a conversar, trabajar y buscar maneras de avanzar hacia una construcción sostenible. Es por eso que hoy agradezco a los socios de la Cámara, quienes se comprometieron desde el inicio en este gran desafío y a las autoridades por confiar en este proceso, ya que sólo a través de la alianza público-privada es posible generar cambios reales en la región”.

Entre las principales metas del APL destaca la implementación de prácticas de economía circular en los procesos productivos de las empresas, focalizadas en consumo de  materiales, generación de RCD y consumo hídrico. 

Además, se desarrollará un plan de capacitaciones centralizado para todas las empresas adheridas, en gestión de residuos y economía circular, y se difundirán casos exitosos de buenas prácticas desarrollados a nivel nacional y regional. 

Sumado a ello, se propiciará un ecosistema de innovación para apoyar la valorización de RCD y la creación de nuevos modelos de negocios circulares. Para ello, la CCHC Puerto Montt liderará una Mesa de Innovación Regional del Sector Construcción que deberá incorporar herramientas de construcción industrializada; desarrollar metodologías de redes de negocio que permitan vincular la oferta y la demanda de servicios de economía circular; incentivar el mercado local e involucrar a todo el ecosistema; y fomentar nuevos talentos de estudiantes a través de convenios con universidades e institutos.

Este trabajo colaborativo se desarrollará en un plazo de 24 meses y fortalecerá la vinculación entre los distintos actores de la cadena de valor del rubro, con el apoyo del Gobierno Regional de Los Lagos, Ministerio del Medio Ambiente, Dirección General de Obras Públicas, el programa Construye2025 del Instituto de la Construcción y la Asociación Nacional de la Industria del Reciclaje (ANIR).   

Fuente: Diario Sustentable

Norma que establece el vocabulario y marco de referencia de la economía circular para la construcción está en consulta pública hasta el 28 de agosto

En 20 días concluye el proceso digital para hacer observaciones sobre el proyecto de la norma chilena 3835 (prNCh3835): “Vocabulario y marco de referencia para atributos e indicadores de circularidad en entornos construidos”. El documento forma parte de una serie de siete normas que se encuentran en desarrollo para el sector de la construcción bajo el título general de “Economía circular-Atributos de circularidad e indicadores de circularidad”. Los especialistas en urbanismo sustentable María Fernanda Aguirre, de Chile GBC, y Jonathan Barton, de CEDEUS, valoran muy positivamente que se dicte una norma relativa a conceptos y definiciones, porque permite actualizar y unificar criterios; asimismo, destacan la relevancia de que diversos sectores públicos y privados participen en la consulta.

Los residuos de la construcción y demolición (RDC) son considerados como uno de los grandes problemas que se deben abordar a nivel mundial para avanzar hacia un desarrollo sostenible. Esto se debe al gran volumen de este tipo de residuos que, en Chile, son el 35% del total de desechos sólidos. Para dimensionar ese volumen, según proyecciones del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), se prevé que para 2025 los RDC alcanzarán los 7,4 millones de toneladas anuales, es decir, una cantidad con la que se podría llenar más de 15 veces el Estadio Nacional.

La disposición de esos residuos, en lugares autorizados y también vertederos ilegales, genera un impacto negativo en la flora y fauna, altera los drenajes naturales, genera contaminación del suelo y de las aguas, tanto superficiales como subterráneas; asimismo, se contamina el aire con su disposición y transporte. Pero el impacto medioambiental de este sector es más amplio; por ejemplo, la producción de hormigón y de acero genera una gran cantidad de emisiones de CO2 y otros gases responsables del cambio climático; y consume muchos recursos hídricos, por mencionar solo algunos impactos.

Norma que establece el vocabulario y marco de referencia de la economía circular para la construcción está en consulta pública hasta el 28 de agosto
La Bioconstrucción en una técnica constructiva sustentable que aplica la economía circular.

En el país, tanto el sector privado como el público han tomado conciencia de este problema y desde hace unos años se empezó a trabajar en diversas estrategias para abordar la situación. Uno de los objetivos principales es transitar desde el modelo lineal de economía -extraer, producir y desechar-, a un modelo de economía circular. Si bien este último se suele asociar al reciclaje de residuos, es mucho más que eso y apunta a reducir el uso de recursos naturales en los procesos productivos, evitar la producción de los residuos, mantener los materiales circulando, etc.

En ese contexto, el Instituto Nacional de Normalización (INN) se encuentra elaborando una serie de normas técnicas para el sector de la construcción, bajo el título general de “Economía circular-Atributos de circularidad e indicadores de circularidad”. Son siete normas -NCh3835 a NCh3841- que se refieren a: Vocabulario y marco de referencia para atributos e indicadores de circularidad en entornos construidos; Materiales, productos y elementos de construcción; Sistemas constructivos; Diseño de proyectos de edificación e infraestructura; Construcción de proyectos de edificación e infraestructura; Barrios y entornos construido; Ciudades.

Para la primera de ellas, NCh3835, sobre vocabulario y marco de referencia, ya existe un proyecto que en estos momentos se encuentra en la etapa de consulta pública, desde el 28 de julio hasta el 28 de agosto próximo.

Sobre la necesidad de tener esta norma, María Fernanda Aguirre, Directora Ejecutiva de Chile Green Building Council (Chile GBC), explica que “todo cuerpo normativo debe contar con una lista de definiciones y referencia a otras normas, ya que esto facilita que exista interacción entre distintos documentos oficiales y, asimismo, unificar criterios tanto a nivel de instrumentos regulatorios nacionales como de uso internacional facilitando la estandarización de conceptos y marcos de referencia”.

A su vez, Jonathan Barton, investigador asociado del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable (CEDEUS) de la UC y la UdeC, comenta que “la economía circular es la versión más reciente de un fenómeno que ya tiene más de 30 años de desarrollo, empezando con la gestión ambiental, pasando por el ecoeficiencia, y normas como las LEED sobre certificación de procesos de construcción, etc. La economía circular es a nueva versión de esos procesos y busca minimizar el uso de materiales, de recursos en los procesos de producción y también en procesos de destrucción y reutilización de estos mismos recursos, por eso es clave tener un vocabulario actualizado y que permita integrar estas normas y certificaciones de ecoeficiencia en la transición socioecológica justa, que es un proyecto entre la Naciones Unidas y el gobierno chileno”.

“Es fundamental tener normas y no solo buenas intenciones y políticas, es la forma de aterrizarlo, de llevarlo a la práctica, y también es necesario asociar claramente los costos de la economía circular en la construcción, ¿quién asume el costo?, ¿el productor?, ¿el financista, siendo el Estado tal vez en muchos casos, o el comprador de ese casa o departamento?”, añade Barton.

“Todo cuerpo normativo debe contar con una lista de definiciones y referencia a otras normas, ya que esto facilita que exista interacción entre distintos documentos oficiales y, asimismo, unificar criterios tanto a nivel de instrumentos regulatorios nacionales como de uso internacional, facilitando la estandarización de conceptos y marcos de referencia”.

María Fernanda Aguirre, Directora Ejecutiva de Chile GBC.
María Fernanda Aguirre, Directora Ejecutiva, Chile Green Building.

¿Quiénes debieran participar en la consulta?

La Directora Ejecutiva de Chile GBC dice que el contar con una norma de vocabulario y que por primera vez aplica a circularidad en el sector construcción, “implica que a nivel de consulta pública se invita a todos los actores de la cadena de valor de la industria, a hacer observaciones para favorecer un proceso consensuado y que se utilice léxico que por un lado sea de conocimiento local, para así favorecer la homologación de un lenguaje que aplique a la realidad nacional, y que por otro lado esté alineado con herramientas de uso internacional y que se han definido como mandatorias en los distintos procesos y etapas del ciclo de vida de materiales, elementos de construcción, edificación, infraestructura y comunidades”.

A su juicio, normar aspectos de circularidad para el sector construcción, es un proceso complejo, porque debe abordar las etapas del ciclo de vida e incorporar consideraciones de flujos de materiales y logística reversa, al tiempo que es vinculante con otros sectores, como transporte y energía. Por esa razón, dice, la convocatoria de la consulta “aplica a todas y todos los actores que no solo estén involucrados directamente en distintas actividades propias de edificación e infraestructura, como son manufactura y distribución de productos, arquitectura, construcción y montaje, administración y facility management y valorización de residuos, sino también a quienes se desempeñan a nivel de gobierno central, regional y municipal y que intervienen en ordenamiento territorial y planificación urbana”.

“Asimismo, es de gran relevancia contar con el aporte de academia, centros de investigación y organizaciones de profesionales y gremios para poder lograr instrumentos consensuados, que sean de uso masivo y permitan levantar datos de la industria y estandarizar el desempeño”, agrega María Fernanda Aguirre.

Coincide con la especialista el investigador de CEDEUS, en relación a que “los actores clave son las mismas empresas constructoras y las agencias del Estado que fijan estándares en la producción de vivienda pública (…) La consulta pública en normas nacionales, o normas ISO, es principalmente para expertos en el rubro, tanto del Estado como del sector privado, que producen y diseñan, además del mundo académico, que tiene un rol en promover ciertas normas en aislación, en la selección de materiales, etc.”

No obstante, Jonathan Barton añade que también pueden entregar su opinión “las organizaciones que participan en demandas de vivienda, para ver cómo las puede impactar. En general hay poca conciencia de lo que significa comprar o habitar una vivienda o edificación sustentable, no ha sido muy difundido, pero poco a poco en ciertos sectores hay conciencia de que una edificación bien construida reduce potencialmente el costo en calefacción, en enfriamiento, potencialmente el uso agua -la posibilidad de separar aguas grises, por ejemplo-. Por eso, todos los consumidores, habitantes de la ciudad, habitantes de vivienda, somos participantes en esta producción del espacio y la construcción”.

El académico agrega otro actor como potencial participante de la consulta: los bancos y otras instituciones que financian la vivienda. “Es fundamental que ellos participen porque, de cierta forma, es un riesgo que ellos toman asociados con la persona que tiene la deuda habitacional. (…) Es importante tener una idea de cuánto cuesta la ciudad más sustentable, la edificación más sustentable, en el mediano y largo plazo, dónde están las ganancias y quién debe asumir los costos. Porque en este momento estamos todos asumiendo costos, por ejemplo, de una edificación en malas condiciones, en el sentido que implica mayores gastos en energía y agua asociados con los materiales y la forma de construir”.

“Es fundamental tener normas y no solo buenas intenciones y políticas, es la forma de aterrizarlo, de llevarlo a la práctica, y también es necesario asociar claramente los costos de la economía circular en la construcción, ¿quién asume el costo?, ¿el productor?, ¿el financista, siendo el Estado tal vez en muchos casos, o el comprador de esa casa o departamento?”.

.Jonathan Barton, investigador asociado del CEDEUS.
Jonathan Barton, investigador asociado del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable (CEDEUS) de la UC y la UdeC.

La necesidad de las normas

Las siete normas que están actualmente en elaboración por el INN se vinculan con una serie de otras iniciativas y normas, como la Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular 2040 elaborada por el Ministerio del Medio Ambiente (MMA); la Hoja de Ruta RCD (Residuos de Construcción y Demolición) de Economía Circular en Construcción 2035 elaborada por los Ministerio de Vivienda y Urbanismo, de Obras Públicas, del Medio Ambiente y Corfo; y la Estrategia Climática de Largo Plazo hasta 2050 establecida en la Ley 21.455 Ley Marco de Cambio Climático.

En la introducción del proyecto de la NCh3835 sometido a consulta pública se señala que “específicamente para el sector de la construcción, la transición hacia una economía circular es un desafío importante puesto que implica considerar el ciclo de vida de los activos construidos, desde la concepción de un proyecto, incluyendo la selección del terreno, el diseño, la elección de materiales y sistemas constructivos, las  especificaciones técnicas y la gestión de residuos durante la construcción”.

“También implica considerar otras etapas antes no consideradas, como la etapa de post venta, incluyendo el mantenimiento, la renovación, la adaptación y la rehabilitación de los activos construidos. Incluso podría contemplar la demolición parcial en ciertos proyectos, con la extracción selectiva de partes y piezas reutilizables mediante procesos de deconstrucción. En última instancia, considera la demolición destructiva y la valorización de los RCD para obtener materiales que puedan ser utilizados en nuevos  ciclos de construcción”, agrega la introducción.

Asimismo, añade que implementar la economía circular en este sector productivo implica un cambio de paradigma, lo que hace necesario establecer un marco de referencia con atributos e indicadores para poder medir sus avances.

En ese contexto, ¿cómo aporta la normativa a impulsar una construcción más sostenible? La Directora Ejecutiva de Chile Green Building Council responde haciendo referencia a algunas carencias del sector donde las normas pueden ser un aporte“Una de las principales problemáticas en el sector construcción es la falta de datos relacionados con uso de materias primas, valorización de recursos, información de procesos logísticos y caracterización de tipos de productos y residuos utilizados en un país tan diverso geográfica y climáticamente como Chile. La carencia de información dificulta el determinar líneas base de desempeño y, por lo tanto, definir metas asociadas a uso de materias primas no renovables, restauración y regeneración y emisiones de carbono”.

“Contar con una normativa de indicadores permitirá, por un lado, que se estandarice los parámetros de evaluación favoreciendo la comparabilidad y mejora continua, y que, en consecuencia ,se incentive la medición, transparencia y comunicación de desempeño, relacionando la comunicación de desempeño circular con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y Marcos ESG (Criterios ambientales, sociales y de gobernanza corporativa)”, subraya Aguirre.

Barton, por su parte, es tajante: “La normativa es clave para tener una construcción más sustentable, un sector de edificación más sustentable”.

El investigador de CEDEUS explica que “si pensamos en los grandes planteamientos, las visiones, los imaginarios de la ciudad sustentable, y vamos bajando a estrategias, políticas, planes, diseño, terminamos con las normas, que son los elementos fundamentales que rigen las condiciones, los estándares de construcción, la procedencia de los materiales, qué hacer con los desechos, la circularidad en el corto plazo en el proceso de construcción y en el largo plazo de la vida útil de la vivienda. Entonces, es primordial que tengamos normas claras, y que vayan evolucionando en el tiempo”.

“Las normas son indispensable porque afectan el día a día de las operaciones de las empresas de construcción, y son normas que pueden ser fiscalizadas. Por eso es importante esta posibilidad de tener normas y estándares que tengan aceptación generalizada, y que sean fiscalizados, para asegurar que somos capaces de implementar estas grandes visiones en la práctica. Las normas van aterrizando estas grandes ambiciones en las prácticas cotidianas”, resume Barton.

Con la gran cantidad de residuos de la construcción y demolición que se generan cada año en Chile, alcanzaría para llenar el Estadio Nacional unas 15 veces.

Definiciones, principios y la invitación a hacer comentarios

Entre otros aspectos, el proyecto de norma Ch3835 incluye 38 términos y definiciones: 30 relativas a economía circular; 3 relacionadas a materiales, productos y elementos de construcción; 2 vinculados a sistemas constructivos (tradicionales y no tradicionales); 2 a barrios y entornos construidos; y 1 relativo a ciudad.

Entre los términos destacan, por ejemplo: economía circular, definida como “sistema económico que utiliza un enfoque sistémico para mantener un flujo circular de recursos, mediante la recuperación, conservación o aumento de su valor, contribuyendo al desarrollo sostenible”; ecodiseño, explicado como “diseño y desarrollo basado en el pensamiento del ciclo de vida destinado a apoyar el desarrollo sostenible”; y resiliencia, que se expone como la “capacidad para soportar, resistir, adaptarse o recuperarse de eventos o condiciones disruptivas, ya sean naturales o antropogénicas”; regenerar, que consiste en “mejorar o restaurar un ecosistema degradado”.

También se definen, entre otros: reparación, reúso, reacondicionamiento, refabricación, readaptar, recursos naturales, sistema económico y trazabilidad.

Asimismo, la propuesta normativa incluye 13 principios con los que se deben llevar a cabo las actividades de todos los actores de la economía circular en el sector construcción. Uno de esos principios es Regenerar sistemas naturales y proveer resiliencia, lo que se explica de la siguiente forma: “Se busca conservar el medio ambiente, evitar el daño ambiental, y aportar en la regeneración de los ecosistemas, su protección, el aumento de la biodiversidad y resiliencia de ciudades, la prestación de servicios ecosistémicos, reduciendo posibles impactos derivados del cambio climático y de los desequilibrios ambientales”.

El documento elaborado por el INN contiene apartados como “Iniciativas, herramientas y normas”. “Atributos de circularidad”, “Indicadores de circularidad, entre otros.

En el apartado 5.3, sobre “Niveles de aplicación en el sector de construcción”, hay dos ítem donde se ha incorporado la siguiente Nota de Secretaría: “Se requiere completar esta sección. Se invita a hacer comentarios en la Consulta Pública”. Se trata de los niveles correspondientes a “Barrios y Entornos construidos”, “Ciudades”.

El proceso de consulta pública se realiza de manera digital en el sitio http://www.consultapublica.cl/ y aún quedan 20 días para hacer observaciones y comentarios.

Fuente: CDT

CES alista su plan de trabajo para segundo semestre

Los énfasis están puestos en la versión CES Aeropuertos y la actualización de la metodología de hospitales.

La agenda de la certificación viene bastante cargada de actividades para este segundo semestre. 

En una primera línea de trabajo, “seguimos realizando proyectos pilotos para las versiones en desarrollo de CES Edificios Existentes y CES Centros Comerciales”, comenta Hernán Madrid, jefe de CES.

En una segunda línea, sobre los nuevos desarrollos “tenemos programado el comienzo del trabajo de la actualización de la versión CES 1.1 Hospitales y el desarrollo de la versión CES 1.0 Aeropuertos”, añade. Finalmente, las actividades propias de la operación de la certificación entre las que destacan continuar con la difusión de la versión CES 1.1 Edificios de Uso Público, seguimiento de edificios certificados y la quinta versión de los Premios CES que se realizará en octubre de este año.

CES Aeropuertos

Con la apertura de la licitación de la Dirección de Aeropuertos del Ministerio de Obras Públicas, para el desarrollo de los estudios necesarios para llevar a cabo la versión de CES Aeropuertos, se concretó uno de los hitos del plan de trabajo que el equipo de Certificación Edificio Sustentable tiene planificado para el segundo semestre.

Éste implica el inicio del funcionamiento de los comités técnicos que comenzarán a trabajar con los insumos generados de dichos estudios, cuyo primer informe se espera que esté listo a fines de octubre.

El trabajo que está planteado a partir de esta licitación abarca aproximadamente dos años, iniciándose en agosto de este 2023, con un presupuesto de más de 500 millones de pesos a ejecutar por la Dirección de Aeropuertos.

Otro de los hitos para la versión de Aeropuertos de CES fue la visita al aeródromo Julio Gallardo en Puerto Natales, en la que el jefe de CES y profesionales de nivel central de la Dirección de Aeropuertos del MOP pudieron comenzar el trabajo en terreno para levantar las condiciones incidentes en la certificación del terminal de pasajeros, torre de control e instalaciones de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) dentro del recinto aeroportuario.

Karen Jara y Martita Molina, profesionales de la Dirección de Aeropuertos MOP, con Hernán Madrid.

Durante el cuarto trimestre de este año, se realizará la invitación a la conformación de un comité técnico para la versión CES Aeropuertos.

CES Hospitales

Por otra parte, el equipo CES, de sus visitas en terreno a distintos hospitales, ha recogido feedback de la puesta en marcha de dichos recintos, que servirá como insumo para la actualización de la versión CES Hospitales.

De esta manera, han podido obtener experiencias y comentarios del Hospital de Curicó, certificado CES en nivel sobresaliente, Hospital de Quillota Petorca, certificado en nivel destacado y del Hospital de Puerto Natales, que aún cuando no se encuentra certificado, se utilizó para calibrar la versión actual.

Uno de los puntos claves, que han sido transversales en todos los hospitales, es la conveniencia de incorporar al sistema CES la figura de un “inspector energético” “por la necesidad de tener un acompañamiento en el proceso en estas grandes infraestructuras y la puesta en marcha de sistemas complejos de climatización y control centralizado”, asegura el ingeniero.

Adicionalmente, es necesario incorporar la mirada de la versión CES 1.1 para Edificios de Uso Público en lo que respecta a huella de carbono, ERNC y Gestión de residuos. A partir de septiembre de este año comenzará a sesionar un comité técnico para esta actualización.

Positivo desempeño tuvo CES el primer semestre de 2023 

En este período, CES inscribió más de 40 proyectos y varios se precertificaron con excelentes puntajes, superando, incluso, los 80 puntos. 

El primer semestre del año cierra con excelentes números para CES: inscribió un total de 42 proyectos con la metodología 1 y 6 proyectos inscritos la versión 1.1.

Asimismo, se produjo otro relevante hito: la inscripción de proyectos bajo la versión CES Edificios Existentes, destacando las Oficinas Corporativas Volcán, las cuales son piloto de esta nueva versión, actualmente en desarrollo. B-Green como asesores CES y Mussa Arquitectos estuvieron a cargo del interiorismo de los nuevos espacios de trabajo de Volcán Soluciones Constructivas bajo la certificación CES.

Otro hito relevante es el ingreso del primer colegio privado: el Colegio Alemán de Santiago Sede Las Condes, a cargo de los arquitectos Lambiasi Westenenk Arquitectos + Marcela Schmauk y con Cristián Huenullan, como asesor CES.

Colegio Alemán de Santiago.

También resalta la inscripción de nuevos desarrollos de infraestructura universitaria, como el caso de la Universidad de Talca, con el Edificio Laboratorios de Microbiología y Biología y Biotero, en la que la ingeniera y asesora CES María Luisa del Campo estuvo a cargo de la inscripción y asesorías de ambos edificios, los que tuvieron especificidades por sus características particulares y que confirman la voluntad de la UTalca por seguir certificando futuras construcciones. La casa de estudios está impulsando que todos sus edificios, tanto los que están en proceso de diseño como sus edificios que van en un futuro a pasar a un proceso de licitación, cuenten con estándares CES. 

La Pontificia Universidad Católica también está en el mismo pie, con el Edificio Marcoleta 432 y el Edificio Medicina Veterinaria. Éstos se encuentran enmarcados en el proyecto de construcciones sustentables de la UC. El edificio docente para la carrera de Medicina Veterinaria fue realizado por Dieguez Arquitectos y es una moderna infraestructura de cuatro niveles. La misma oficina de arquitectura fue la encargada del proyecto para el Edificio de Laboratorios, ubicado en Marcoleta 432.

Por su lado, la Universidad Católica de Temuco inscribió el Hospital de Simulación Clínica y el Pabellón Docente, con el arquitecto Iván Cisternas a cargo de ambos edificios.

La Universidad de O´Higgins, a través de su Facultad de Ingeniería, con tres edificios: Edificio Deportivo, Auditorio y Casino y Escuela, todos ubicados en el Campus Rengo, y diseñador por Ofarquitectos ltda., con Nathalie Jaimes de Bgreen como asesor CES.

Infraestructura hospitalaria

En la versión CES Hospitales hay tres inscritos en la región del Maule:

  • Hospital de Cauquenes: con 21.888,79 m2, fue diseñado por Luis Vidal + Arquitectos. Este establecimiento hospitalario de mediana a alta complejidad ofrecerá una capacidad de 136 camas, con una superficie proyectada de 47 mil m2. El Hospital de Cauquenes será el único establecimiento de estas características en la provincia y atenderá la demanda de Cauquenes, Chanco y Pelluhue, además de la coordinación con los otros centros asistenciales que conforman el Servicio de Salud del Maule.

La población beneficiaria de su área de cobertura se estima en aproximadamente 59.000 personas, considerando a toda la provincia de Cauquenes que presenta altos índices de ruralidad, además de ser una de las zonas de la Región del Maule que presenta uno de los mayores tiempos de desplazamiento hacia los otros establecimientos de mayor complejidad.

  • Hospital de Parral: con 20.465,22 m2, también diseñado por Luis Vidal + Arquitectos. El proyecto consiste en un establecimiento hospitalario de mediana a alta complejidad, que tendrá una capacidad de 121 camas, con una superficie proyectada de 41 mil m2 y se ubicará en la comuna de Parral. El Hospital de Parral será el único establecimiento de estas características en la zona sur de la provincia de Linares y por tanto los centros asistenciales de ese sector podrán derivar hacia este nuevo Hospital, además de la coordinación con los otros establecimientos que conforman el Servicio de Salud del Maule.

La población beneficiaria de su área de cobertura se estima en aproximadamente 58.000 personas, incluyéndose a toda la zona sur de la provincia de Linares que presenta altos índices de ruralidad.

  • Hospital de Constitución: 21.779,86 m2, diseñado por Luis Vidal Arquitectos. El proyecto consiste en un establecimiento hospitalario de mediana a alta complejidad, que tendrá una capacidad de 111 camas, con una superficie proyectada de 46 mil m2 y se ubicará en la comuna de Constitución, región del Maule. El Hospital de Constitución será el establecimiento de referencia para los establecimientos de salud ubicados en la costa del Maule, coordinado con la red del Servicio de Salud del Maule, con una población beneficiaria de 57.000 habitantes aproximadamente.

Altos puntajes en precertificación CES

Un total de 30 proyectos precertificados ingresó durante enero y junio de 2023, destacando los altos puntajes en esta categoría: Retén de Carabineros Río Tranquilo, con 81 puntos, fue diseñado por Carvajal Casariego Riesco Rivera Arquitectos, la asesora CES es Cecilia Palarino y la entidad evaluadora 88 LIMITADA.

Otro proyecto a destacar es la Reposición Posta de Salud Rural El Divisadero, con 74,5 puntos, diseñado por el arquitecto EIRL Christian Araya Castro, con Rodrigo Escobar como asesor CES y 88 LIMITADA, como entidad evaluadora.

Además, entre enero y junio hubo siete proyectos certificados en total, destacando los de mayor puntaje:

  • Liceo B-15 Jorge Teillier, con 76 puntos, obteniendo un nivel sobresaliente. Diseñado por Arquitectónica Ltda, el asesor CES es Alejandro Reyes y la entidad evaluadora 88 LIMITADA.
  • 4º Comisaría de Curanilahue, con 70 puntos. El arquitecto es Javier Troncoso, en tanto que el asesor CES es Iván Orellana y la entidad evaluadora 88 LIMITADA.
  • Liceo Industrial San Fernando, con 67,5 puntos, fue diseñado porValle Cornejo, el asesor CES es Francisco Matero y la entidad evaluadora, ECOSUSTENTA.

De esta manera, CES hace una evaluación positiva de los avances alcanzados en estos meses y mira a la segunda parte del año con objetivos claros y la confianza que les dio este primer semestre para hacerlo.

Escuela La Piedra de Galvarino logró 76 puntos en precertificación CES

Esta es la primera escuela del país con un programa educativo multicultural de cosmovisión mapuche que incluye parte del modelo educativo, infraestructura, equipamiento y mobiliario.

En marzo de este año, en Galvarino, provincia de Cautín, región de la Araucanía, se inauguró la Escuela La Piedra, gracias al Desafío Levantemos Chile. Se trata del primer colegio con un programa multicultural en el país; cuenta con una superficie total útil de aproximadamente 2.000 m2; beneficiando a más de 160 alumnos. Diseñada por Correa3 Arquitectos, contempla la accesibilidad universal, confort técnico y lumínico adecuado para los usuarios, envolvente térmica; entre otros elementos sustentables. 

Eugenio Correa Murillo, es arquitecto y gerente general de la firma arquitectónica que construyó la Escuela, y cuenta que “el proyecto recoge aspectos de la cosmovisión Mapuche, la que fue transmitida por la Machi y la comunidad, lo circular, todos iguales, la luz del oriente entrando en la mañana, ritos y bailes recordando a sus antepasados, salas y patios circulares, los árboles sagrados, el rehue; entre otros”.

Como asegura, “la estrategia arquitectónica fue emplazarse en el terreno tomando en consideración el territorio, las orientaciones, materiales adecuados y eficientes, sistemas constructivo de paneles SIP, que permite una obra seca, pasillos interiores que aportan a la eficiencia energética; el proyecto se desarrolló en todas sus especialidades usando BIM, lo cual permitió previsualizar el modelo 3D para lograr una ejecución de obra sin imprevistos”.

En tanto, desde el punto de vista educativo, Correa destaca las salas circulares: “no hay jerarquías, el docente participa armónicamente en la búsqueda del conocimiento incentivando a que los y las alumnos/as despierten su interés por aprender”.

Y desde el punto de vista de la sustentabilidad, cree que trabajar con CES “ayudó a mejorar aspectos técnicos para lograr mejor envolvente térmico”.

Elementos sustentables

“Alejandro Reyes, asesor CES y socio fundador de la empresa EECOS Energía Eficiente, participó de la certificación del proyecto. También menciona los paneles industrializados SIP y envolvente continua adicional, con fachada ventilada para un óptimo control higrotérmico, resistencia térmica optimizada, puentes térmicos disminuidos y hermeticidad mejorada, al generar un espacio adicional para el paso de instalaciones disminuyendo penetraciones. “El panel SIP permitió una construcción industrializada que disminuye las pérdidas, despuntes y basura durante el proceso de construcción, otorgándole desde ya mayor sustentabilidad al proyecto”, dice.

Se consideró, además, aislación térmica bajo radier, ventilación con recuperación de calor, ventanas low-e, ventana cenital y orientación con acceso visual, características que también maximizan el aprovechamiento de ventilación e iluminación natural.

Al preguntarle por las estrategias utilizadas para obtener un alto puntaje en la precertificación (76 puntos), explica que “el diseño integral consideró el encargo realizado a arquitectura de mantener una cosmovisión mapuche, con los requerimientos propios de una escuela. Durante el desarrollo del proyecto se fueron evaluando todos los requerimientos CES y su posibilidad de implementación”.

De esta manera, “los requerimientos logrados son resultado del enfoque del diseño en minimizar el consumo energético (por ejemplo, a través de la envolvente higrotérmica optimizada); aumentar el confort interior (por ejemplo, a través del uso de recuperadores de calor y sensores CO2) y aumentar la vida útil del edificio. Así, se logra una escuela con confort óptimo a través, principalmente, de estrategias pasivas de iluminación, ventilación y calefacción y una disminución de los consumos energéticos, tanto de calefacción como de electricidad, además de una disminución importante en el consumo de agua”, especifica el asesor CES.

Sustentabilidad y cosmovisión

El diseño está basado en la cosmovisión mapuche, donde la comunidad solicitó mantener la tradición de contar con una llama de fuego al interior del aula, simulando el fogón mapuche de la Ruka.

“Considerando el requerimiento de la certificación CES, no se puede utilizar calefactor a llama abierta al interior del recinto, es por esto que se evalúa el uso de calefactor a pellets con toma y entrega de aire de combustión desde y hacia el exterior. De esta manera, además, se responde a la necesidad de visibilidad de una llama al interior del aula. Esto se complementa con la iluminación cenital que genera el lucernario justo al centro del aula”, afirma Reyes.

Y “adicionalmente, quisiera agregar sobre la memoria de arquitectura que me entregaron los arquitectos alguna vez, que explica de mejor manera el diseño conceptual consensuado con una comunidad mapuche:

En reunión con comuneros Mapuche de Ercilla, en Temuco, logramos dialogar con ellos para conocer cómo debía ser un proyecto de arquitectura para una comunidad Mapuche.

De esas reuniones concluimos que este colegio debía cumplir con ciertas particularidades arquitectónicas que lo hacen diferente al resto de los establecimientos educacionales.

Lo primero que nos indicaron fue la importancia de la circunferencia, los puntos cardinales y la ortogonalidad, los que aparecen en su escudo, el sol la luna y por supuesto la tierra, no puede faltar el lugar para las ceremonias con el Canelo al centro.

Las reuniones se realizan en círculo, esta ubicación responde a que todos son iguales, todos tienen que estar a la misma distancia del Canelo, lo mismo en las salas de clases, los alumnos deben estar en círculo a la misma distancia del profesor, todos son iguales, no hay privilegios.

Otra particularidad es la necesidad de que el primer rayo de sol entre a la sala de clases, antes de que entren los alumnos.

Esta escuela se caracteriza también por su actividad de teatro y música, además de contar con un sector para su deporte.

La distribución general de la propuesta arquitectónica considera dos sectores circulares, que separan las distintas edades de los alumnos, y que conforman dos patios separados por un acceso, respetando una ortogonalidad, y aceptando el lugar para las ceremonias con el Canelo en su centro.

Todas las salas tienen una cúpula superior, transparente por donde el primer rayo de sol penetra, cumpliendo con esta tradición y cosmovisión Mapuche. Las salas se han separado para disminuir efectos acústicos de una sala con la otra con un espacio de trabajo para el profesor.

Muy importantes son las condiciones propias del lugar, el territorio particular de esta escuela, donde se ha tomado en cuenta el medio ambiente, las distancias, colegio hogar, el clima y principalmente empatizar y escuchar a los habitantes locales”.

Equipo CES visita edificios certificados en el Maule

El equipo de CES estuvo en Curicó y Talca para recorrer los edificios certificados y premiados, así como para reunirse con autoridades de la región.

Como parte del programa de revisión y seguimiento a los edificios certificados, el equipo de CES visitó la región del Maule en mayo.

Hernán Madrid, jefe de CES, partió su gira en la sede Curicó de la Universidad de Talca, donde se reunió con el equipo de la entidad evaluadora Kipus: María Luisa del Campo y Francisco Mateo, quienes también hacen asesoría a proyectos. “Uno de los primeros objetivos de la reunión era cubrir los cuatro pilotos de aeropuertos que ellos están participando: Aeródromo de Puerto Natales, Aeródromo de la Antártica, Aeropuerto de La Florida de La Serena y el Aeropuerto Internacional Mataveri de Rapa Nui. Y luego, los proyectos de la U. de Talca: el Bioterio y el edificio Laboratorios de Microbiología y Biología. Fue una muy buena reunión”, compartió.

Luego en Talca se reunió con Rodrigo Aravena, director regional de la DA MOP y con Nelson Parra, Inspector fiscal DA MOP, para visitar la Piscina Temperada de Talca, la cual fue ganadora del primer lugar del Premio CES 2021. “Me llevé una súper buena impresión de cómo está funcionando el edificio”, comenta Madrid. “La piscina tiene un uso contínuo, vino a ocupar un espacio importante para el desarrollo deportivo de la gente, no sólo de clubes deportivos de natación, sino también de adultos mayores, de gente que va a nadar, a hacer clases, de niños… Entonces, ha sido super positiva en términos de comunidad y se está usando mucho. La infraestructura es excelente, lleva un par de años funcionando y está en un muy buen nivel. Uno de los problemas frecuentes de las piscinas temperadas son los de condensación en las superficies interiores en los meses de invierno y en este caso fue muy bien resuelto”, agrega.

Para finalizar su visita tuvo reunión con la Dirección de Arquitectura en el Ministerio de Obras Públicas, en donde destacaron los tres años consecutivos de premios de proyectos certificados CES, el esfuerzo y el elevado estándar de la región del Maule por lograr la eficiencia energética en sus construcciones y el avance en términos de sustentabilidad.

Infraestructura hospitalaria

El 31 de mayo, Hernán Madrid, junto a Paola Molina, presidenta de CES, y la arquitecta Romy Luckeheide, visitaron el edificio ganador del primer lugar de los Premios CES 2022: el Hospital de Curicó, el cual se encuentra en un 45% operativo. 

Carolina González, arquitecta coordinadora de los proyectos Normalización Hospitales Curicó y Linares del Servicio de Salud Maule; acompañó a la comitiva y mostró los distintos lugares del centro de salud y sus avances. Al inicio se realizó una reunión de trabajo en la que participaron directivos del hospital, de su área de construcción, del Servicio de Salud y del Ministerio de Salud.

Paola Molina, presidenta del Comité Directivo del CES, comentó: “pudimos compartir la experiencia de ellos en esta puesta en marcha del edificio que, sin duda, ha sido un beneficio incuantificable en cuanto a los usuarios. Quedan todavía algunos temas pendientes, de los cuales hemos podido tomar nota y ver para futuro mejorar los alcances de la certificación, que nos permitan hacer un empalme adecuado con los mandantes y los usuarios del edificio en todos los temas técnicos”. 

La climatización es central para la versión CES Hospitales y en la visita se pudo constatar las condiciones que están teniendo los usuarios del Hospital de Curicó. Al respecto, José Garcés, jefe de mantención del hospital, comentó que el sistema es 100% eléctrico y hoy no se ha logrado implementarlo por completo para climatizar los ambientes, por problemas de calibración de las bombas de calor en las que se está trabajando: “Como proyecto en sí, es sorprendente”, confidenció.

“Hemos constatado que hay un muy buen desempeño en la calidad del ambiente para los usuarios”, señaló Hernán Madrid. A su vez, Carolina González sugirió la implementación de la figura de un “inspector energético” por la necesidad de tener un acompañamiento en el proceso.

La reunión inicial sirvió para recaudar información en vista a la nueva red de salud Maule. A su vez, el doctor Mauro Salinas, director del Hospital de Curicó, afirmó que “fue muy interesante la visita en términos del desafío que nos estamos planteando para que la eficiencia energética en este nuevo hospital sea parte de los procesos, así que estamos muy contentos con la visita y por el apoyo de los profesionales de CES. Esperamos ir avanzando para que este desafío de este nuevo Hospital de Curicó -que es tan esperado por la comunidad- sea un edificio sustentable que cumpla con todos los requisitos de eficiencia energética”.

Energía: la categoría que presenta los mayores cambios en el Manual CES 1.1

La sección de Energía ha incorporado cambios mayores en la versión 1.1 de la metodología CES, lanzada en enero de 2023, los que están relacionados con un mejoramiento del estándar, el énfasis en ERNC y la incorporación del requerimiento de huella de carbono durante la operación.

La categoría de energía es la que ha incorporado cambios más grandes con la versión 1.1 del Manual CES, específicamente en la demanda de energía, y en el requerimiento obligatorio de cumplimiento.

Como explica Hernán Madrid, jefe de CES, hay un alza en el estándar, específicamente en la transmitancia térmica de muros, cuyos valores de referencia mínimos fueron incrementados en términos de exigencia, lo que va en línea con la realidad de la construcción y con las necesidades reales de aislación térmica en estas zonas climáticas. En las otras variables, se produjeron pequeños ajustes.

Por otra parte, hubo un cambio relevante en el enfoque de las infiltraciones de aire. “En la versión 1, la metodología estaba basada en la dirección de viento y calibrado por ciudades, basado en un estudio de la Universidad de del Bío-Bío que ve la hermeticidad de la envolvente. Y ahora se cambió a un enfoque metodológico que ya existe en la versión CES Hospitales, basado en ASHRAE, que establece requerimientos en términos de infiltración de aire dependiendo de las zonas climáticas”, comenta Madrid.

Asimismo, hay una precisión en la comparación del consumo de energía, de acuerdo al tipo de equipo de referencia utilizado, como caldera o bomba de calor.

“Durante muchos años nos solicitaron a la administración CES realizar un ajuste, relacionado con una mayor precisión del aporte de energías renovables no convencionales, por lo que hemos desagregado más niveles de aporte de ERNC en porcentajes más bajos de lo que teníamos en la versión 1, de manera que un proyecto que incorpore energías renovables, aun cuando no tenga una cobertura tan grande como pedíamos anteriormente, también puedan tener algún reconocimiento, aunque sea un puntaje menor”, precisa el ingeniero.

Nuevo requerimiento

En sintonía con las necesidades de cuantificación e información a nivel país, se incorporó un nuevo requerimiento de huella de carbono en la operación. “Esto va en línea con el requerimiento de cálculo de consumo de energía, y con la misma lógica que tienen todos los requerimientos de CES, en términos de tener un edificio de referencia y el edificio que se está diseñando, calculando un ahorro, en este caso, en términos de CO2 o de huella de carbono durante la operación”, sostiene Hernán Madrid.