Prueba CES comienza a incluir contenidos del Manual CES 1.1

A partir del 26 de mayo de 2023, los conocimientos exigidos son los que incluye la versión 1.1 del Manual y el Manual 2 de Operación de Edificios de Uso Público. Conoce aquí dónde encontrar todo el material de estudio.

Para acreditarse como asesor CES se debe rendir una prueba en formato online en la plataforma de Google Classroom, la que está disponible cada dos meses, el último viernes del mes.

La prueba, que es gratuita, mide en términos generales el conocimiento sobre los alcances, objetivos, estructura y principales requerimientos del sistema CES. A partir del 26 de mayo de 2023 se comenzó a aplicar la versión 1.1 del Manual CES, por lo que los contenidos pueden revisarse principalmente en el Manual Evaluación y Calificación Edificios de Uso Público v.1.1 y Manual 2 de Operación de Edificios de Uso Público, descargables en la sección Documentos del sitio web de CES, y todo el material técnico disponible en nuestro canal de YouTube.

1.- Capacitación Manual v1.1

2.- Plataforma:

Presentación plataforma:

Asesores:

Evaluadores:

Actualizaciones plataforma según versión 1.1:

Asimismo, se recomienda consultar las siguientes notas publicada en los newsletter de CES, para su preparación:

Cómo postular

Los interesados deben inscribirse previamente, enviando un correo a la cuenta pruebas@certificacionsustentable.cl hasta 10 días hábiles antes de la fecha de rendición, detallando la ciudad donde reside, y adjuntando la siguiente documentación digitalizada:

  1. Certificado de título o título profesional.
  2. Currículum Vitae (CV) firmado por el postulante, detallando al menos el nombre y fecha de los proyectos en los que se ha participado y que consideraron criterios de sustentabilidad.
  3. Certificado/s de participación en al menos tres proyectos dentro de los últimos cinco años, que consideraron criterios de sustentabilidad. El/los certificado/s deben ir firmados por un representante del cliente, en el caso que el postulante haya actuado como asesor directo, o bien por la autoridad o jefe directo del postulante, en caso de haber participado como parte de una institución o empresa. Los certificados detallarán el nombre del proyecto, cliente, fecha de realización y los alcances de la participación del postulante.

Podrán postular personas naturales con tres años de experiencia laboral en construcción sustentable y de las siguientes profesiones: ingeniero civil, ingeniero constructor, constructor civil, arquitecto, ingeniero acústico o ingeniero en climatización.

Adicionalmente, pueden postular personas naturales de profesiones distintas a las mencionadas, en la medida que:

  • Demuestren al menos seis años de experiencia en construcción sustentable, o
  • Hayan participado en al menos nueve proyectos relacionados en los últimos tres años, o
  • Junto con los seis años de experiencia y la participación en al menos nueve proyectos relacionados, cuenten con un diplomado o grado de magíster asociado a construcción sustentable.

Realizar un curso no es requerimiento para rendir la prueba de acreditación. El Instituto de la Construcción, entidad administradora de CES, no realiza cursos de preparación, pero tiene convenio firmado con el Chile GBC y con IDIEM de la Universidad de Chile, los que presentan cursos programados. 

Materiales y Residuos: cómo quedó conformada la categoría en el Manual CES 1.1

Esta actualización une las categorías ARQ. & CONST. Materiales y Residuos, a través de tres variables: Declaración Ambiental de Productos, Residuos en Operación y Gestión de Residuos en la Construcción.

Los requerimientos asociados a Materiales en la versión 1 estaban divididos en dos categorías ARQ.Residuos y CONST.Residuos, ambas relacionadas con el manejo de residuos, tanto en el diseño como en la construcción y operación del edificio.

En tanto, la versión 1.1 de CES une ambas categorías en ARQ. & CONST. Materiales y Residuos.

Esta categoría contiene tres variables: 

8.Declaración Ambiental de Productos 

9.Residuos en Operación 

10.Gestión de Residuos en la Construcción.

Así, “los proyectos tienen ahora la posibilidad de postular al requerimiento relacionado a la especificación de materiales con Declaración Ambiental de Productos (DAP) a través de dos opciones: la primera es entregando la información de materiales o productos para la construcción permanentemente instalados o declarando información de al menos un 20% del presupuesto total de materiales de la obra”, explica Romy Luckeheide, arquitecta de CES.

La Declaración Ambiental tipo III, Declaración Ambiental de Producto o DAP, proporciona datos ambientales cuantificados, utilizando parámetros predeterminados, basada en el análisis de ciclo de vida según norma internacional ISO14025.

En ese sentido, “para CES es muy relevante promover el uso de materiales que identifique y cuantifique su impacto ambiental preparándonos y en miras a una futura versión 2.0 de CES, donde las DAP serán necesarias para la medición de huella de carbono en el ciclo completo de la edificación”, analiza la profesional.

Por su parte, la variable 9.Gestión de Residuos en Operación contempla un requisito voluntario que debe ser considerado desde etapas tempranas del proyecto, donde el diseño del edificio considere espacio suficiente que permita el almacenamiento de residuos reciclables por separado y una acumulación de determinados días. Además, “se debe considerar accesos que faciliten el depósito y el retiro adecuado. Se debe presentar un plan que posibilite en un futuro a la administración del edificio poner en marcha el reciclaje de residuos en operación”, explica Luckeheide.

La variable 10.Gestión de Residuos en la construcción presenta dos requerimientos obligatorios: el 10R1 y 10 R2 y a diferencia de la versión anterior (v1), donde se solo se solicitaba demostrar con reportes mensuales de obra el cumplimiento del artículo 5.8.3 de la OGUC, la que incluye básicamente medidas con el objetivo de mitigar el impacto de las emisiones de polvo y material, la v1.1 del Manual CES suma, además, la obligatoriedad de incorporar un plan de gestión de residuos durante la construcción, basado en la NCh3562 y la cuantificación de residuos de construcción incluyendo demolición y excavaciones.

Y “de forma voluntaria, los proyectos pueden postular al requerimiento Gestión de Residuos: Separación, Control y Reciclaje, donde si bien se debe cumplir con un % mínimo de reciclaje de residuos para obtener puntaje, existe la posibilidad de visibilizar, tanto en los reportes finales que entrega el sistema de certificación como en el sitio público independiente del resultado obtenido, el % de reciclaje final logrado”, señala Romy Luckeheide.

La circularidad llega a la demolición

El sector de la construcción se prepara para continuar impulsado la economía circular en todo el ciclo de vida de la edificación. Cómo lo está haciendo se conversará en el webinar “Gestión Circular de la Demolición”, organizado por Construye2025 para el 25 de mayo.

En el contexto de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035 y la Estrategia Economía Circular en Construcción 2025, Construye2025 organiza el webinar “Gestión Circular de la Demolición”, con el objetivo de introducir la economía circular en las distintas etapas de la demolición, y abordar los desafíos para su implementación mediante iniciativas y buenas prácticas.

“La gestión circular consiste en planificar y ejecutar obras de demolición en un activo construido, considerando principios y estrategias que permitan mantener el valor de materiales y recursos por el mayor tiempo posible, reducir impactos en el medio ambiente, y evitar el daño a la salud de las personas”, comenta Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025.

A nivel nacional, se ha avanzado en la materia a través de la norma NCh3727 “Gestión de residuos – Consideraciones para la gestión de residuos en obras de demolición y auditorías previas a obras de demolición”, que presenta una serie de buenas prácticas para la actividad. Asimismo, ya hay ejemplos de deconstrucción y reutilización de materiales.

Para dar el contexto del escenario actual, Carolina Garafulich, presidenta de Construye2025, y Rubén González, profesional de la Oficina de Economía Circular del Ministerio de Medio Ambiente, darán unas palabras de bienvenida.

Los temas centrales serán presentados por María Eugenia Ubilla, gerente de Medio Ambiente, Flesan; Reynaldo Del Pozo, director ejecutivo de ReusaMaterial, la arquitecta Anamaria De León; y Alejandra Tapia, de Construye2025.

El webinar se realizará este 25 de mayo, a las 10:00 horas, y cuenta con el patrocinio de la Escuela de Construcción Civil de la Universidad Católica.

Inscripciones abiertas aquí: https://forms.gle/MX9DA2hdVgkatHeQ9

Ecobuilding: Nueva entidad evaluadora ingresa a CES

Porque han visto que CES logra alcanzar estándares que tienen un impacto positivo en los habitantes de las edificaciones certificadas, decidieron dar un paso más allá y acreditarse como entidad evaluadora CES.

Ha ingresado a CES una nueva entidad evaluadora. Se trata de Ecobuilding, empresa consultora multidisciplinar conformada por un equipo con más de 20 años de experiencia en eficiencia energética en el sector público y privado.

Desde el 2017, los integrantes del equipo de esta empresa están acreditados como asesores CES, tanto para edificaciones comerciales como de oficinas y edificios institucionales, educacionales, industriales e infraestructura, entre otros. “En el 2022, el trabajo de nuestro equipo asesor fue reconocido en la premiación anual CES en la categoría Edificio Certificado Sobresaliente, al obtener el segundo lugar con la asesoría al Proyecto Oficinas Administrativas Central Hidroeléctrica de Colbún”, comenta el arquitecto John Fookes, consultor energético y asesor CES.

Fookes explica que se sumaron a CES como Entidad Evaluadora, porque “queremos ser parte de este proceso de mejoras en el rubro de la edificación, y creemos que nuestra experiencia es valiosa y puede contribuir al fortalecimiento y desarrollo de proyectos integrales, donde la Certificación CES es una herramienta clave e importante para evaluar, calificar y certificar objetivamente el comportamiento ambiental de proyectos que se ajusta a la realidad nacional”.

El arquitecto agrega que “en nuestra experiencia, hemos visto que la certificación logra alcanzar estándares que tienen un impacto positivo en las personas que utilizan las edificaciones certificadas, lo que se traduce en un impacto real, aportando al bienestar de las personas en proyectos que son un aporte a la sociedad”.

De esta manera, como Ecobuilding buscan generar un impacto real en el bienestar de las personas y sociedad, a través de proyectos personalizados y adaptados a las necesidades de cada cliente con un enfoque en eficiencia energética y sustentabilidad. A juicio de John Fookes, “esto se traduce en soluciones integrales en los distintos ámbitos del proyecto a través de la implementación y gestión de estrategias innovadoras. Esto no sólo agrega valor a los proyectos y clientes, sino que también asegura una inversión a largo plazo con bajos costos de operación, rentabilizando el proyecto en las distintas etapas del ciclo de vida del mismo”.

CChC regionales contribuyen al uso sostenible del agua en proyectos de construcción

Cámaras regionales de Valparaíso y O’Higgins, junto con la Gerencia de Vivienda CChC, presentaron estudio “Uso Eficiente del Agua en la Industria de la Construcción”, el que forma parte de un proyecto desarrollado por el GT interregional Gestión del Agua y que fue desarrollado por la consultora Greening, en un trabajo conjunto con empresas socias.

Con el objetivo de lograr que las empresas de la construcción gestionen de un modo más eficiente y sostenible el agua en el ciclo de vida de sus proyectos y, de esta manera, hacer como gremio una contribución concreta para superar la crisis hídrica que afecta el país, las Cámaras regionales de Valparaíso y O’Higgins, junto a la Gerencia de Vivienda CChC, presentaron hoy en conjunto el estudio gremial “Uso Eficiente del Agua en la Industria de la Construcción”.

Se trata de una investigación acerca del estado del arte en la materia a nivel nacional e internacional, el que fue encargado a la consultora especializada Greening, y con el que se cumple una primera etapa de un proyecto gremial mayor impulsado por el Grupo de Trabajo interregional Gestión del Agua, constituido por socios y socias de las Cámara regionales de Valparaíso y O’Higgins, además de profesionales de la Gerencia de Vivienda CChC.

“A partir de este estudio queremos socializar sus alcances y posteriormente proponer medidas concretas a las empresas socias y en general a la industria de la construcción, para cambiar el comportamiento y hacer esfuerzos genuinos para asegurar la disponibilidad de agua para la población en la actual crisis hídrica que enfrenta Chile”, explicó el presidente de la CChC Valparaíso, Gabriel Benavente, en su saludo de bienvenida.

La actividad se desarrolló de manera presencial en las sedes gremiales de Valparaíso y Rancagua, mientras socios de otras regiones del país se conectaron a través del sistema de video conferencia.

En la oportunidad expusieron la presidenta del GT Gestión del Agua, Andrea Ceruti; la ingeniera especialista el recurso hídrico y académica Damaris Orphanópoulos; los consultores David González e Ivonne Constanzo de Greening; las preguntas de la audiencia tras las presentaciones, fueron moderadas por el vicepresidente del GT Gestión del Agua, el consejero regional y nacional, Pablo González; y cerró el evento el presidente de la CChC O’Higgins, Juan Pablo Gramsch.

“Como gremio, nos desafiamos a gestionar de modo eficiente el uso del agua en nuestras actividades y hacer una contribución concreta para superar la crisis hídrica en nuestro país. Desde nuestras Cámaras regionales, trabajamos en un proyecto destinado a resolver el problema del uso ineficiente del agua en el sector construcción”, expresó Gabriel Benavente

“Este estudio es el resultado de un trabajo integrado de nuestros socios y socias en el Grupo interregional de Gestión del Agua, con el liderazgo de Andrea Ceruti en Valparaíso y Pablo González en la Región de O´Higgins. Estamos orgullosos de poder presentar este estudio y agradecemos la participación de todos los actores involucrados”, agregó el presidente de la CChC Valparaíso.

Por su parte Andrea Ceruti destacó el compromiso del gremio con la construcción sustentable y la oportunidad que significa acceder a la información del estudio y ponerla en práctica en las obras, todo en el marco de la apuesta pro la sostenibilidad de la industria que impulsa el gremio a través de la iniciativa Compromiso Pro.

“Invitamos a todos los actores del sector, a unirse a nuestra apuesta por la sostenibilidad de nuestro gremio y por el desarrollo sostenible de nuestro país. Juntos podemos hacer una diferencia, generar mejores obras y asegurar la disponibilidad de agua para la población”, comentó.

“A través de este proyecto, vamos a proponer y promover la adopción de medidas concretas por parte de las empresas, para responder desde nuestro sector a la emergencia”, concluyó Andrea Ceruti.

Finalmente, Juan Pablo Gramsch señaló que “como gremio de la construcción, nos sentimos llamados a contribuir, a través de la investigación de iniciativas destinadas a mejorar la gestión del recurso hídrico en nuestro rubro. Además de concientizar a nuestros asociados la implementación de estas, con el fin de aportar en el uso eficiente del agua. Nuestro compromiso con el país, nos motiva a buscar nuevas instancias y oportunidades de mejoras para contribuir con el desarrollo sostenible”.

Fuente: CChC

Agua: los cambios del requerimiento en el Manual CES 1.1 

Diseño de paisaje y sistemas eficientes son las principales áreas en las que la versión 1.1 del Manual CES considera cambios, con respecto a la metodología anterior.

En el sistema de certificación CES, los requerimientos relacionados al consumo de agua se materializan, principalmente, en el diseño del paisaje y en la especificación de sistemas eficientes. 

La versión 1.1 de edificios públicos, cuyo uso ya es obligatorio, se centra en que todos los proyectos, sin excepciones, tengan de base un diseño de paisaje que disminuya la evapotranspiración, especificando dentro del proyecto de paisaje vegetación nativa o que se adapte al clima del lugar. El cumplimiento es obligatorio, independiente los m2 de paisajismo que tenga el proyecto o la latitud donde esté ubicado el proyecto.

Asimismo, “se hace una definición más específica de cuál es el significado de paisajismo para CES, que no es el mismo publicado en la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones (OGUC), ya que para la certificación, el área considerada debe ser área verde, lo que excluye paseos peatonales, gravilla y cualquier área donde no existe vegetación”, explica Romy Luckeheide, arquitecta de CES.

En ese sentido, CES reconoce los beneficios y aportes de la vegetación que aportan gran cantidad de oxígeno y disminuye la cantidad de CO2, junto con el efecto de isla de calor, son una contribución a la biodiversidad, entre otros. 

Así, “una vez que el proyecto logra demostrar desde el diseño de paisajismo una reducción mínima de la evapotranspiración, se debe incorporar un sistema de riego eficiente”, señala Luckeheide. 

En tanto, “los proyectos que postulen al requerimiento voluntario de paisajismo y riego eficiente sí tendrán que cumplir con un mínimo de área verde de un 20% de la superficie del terreno”, detalla la profesional.

Al igual que la versión anterior, ésta exige un mínimo de ahorro de consumo de agua potable logrado a través de sistemas como inodoros, lavamanos y griferías eficientes y continúa valorando con alto puntaje los proyectos con ahorros que superan el mínimo. Además, “se considera también en la nueva categoría de innovación, en los edificios que logren un cumplimiento por sobre el nivel máximo definido”, añade.

Por último, la metodología de cálculo utilizada para los requerimientos relacionados al consumo y reducción son los mismos de la versión 1, en base al cálculo estimado del consumo real de agua del edificio y la comparación con un caso de referencia, el que representa un edificio estándar. 

CTEC lanzó Construye Zero, programa que busca hacer frente a la crisis climática

El lanzamiento se desarrolló durante dos jornadas, y contó con la participación de más de 450 asistentes, junto a expertos del País Vasco y de UK.

Con una invitación a sumarse al cambio del modelo productivo en la industria de la construcción nacional, CTEC lanzó este 19 y 20 de abril el Programa Tecnológico Construye Zero, el cual contó con la participación de más de 450 asistentes en ambas jornadas.

Chile es un país altamente vulnerable a la crisis climática, lo que está desencadenando un proceso de cambios importantes en lo que respecta al modo de vivir en sociedad y a la relación e interacción con el medio ambiente. Bajo este contexto se lanza Construye Zero, programa liderado por CTEC y co-financiado por Corfo, que busca impulsar el desarrollo y transferencia de soluciones tecnológicas y sustentables que permitan acortar brechas asociadas a la productividad y eficiencia de recursos, con el objetivo de contribuir a enfrentar la crisis climática.

En palabras de Carolina Briones, directora ejecutiva de CTEC “Construye Zero, busca ser una punta de lanza, una flecha movilizadora de energía que nos saque de la inercia y nos abra caminos. Caminos con ejemplos concretos, que aceleren el cambio cultural, el modo de pensar y actuar, y no sólo de las próximas generaciones, por qué no, iniciando con todos nosotros los presentes”.

La iniciativa contempla un portafolio con 10 proyectos que consideran tecnologías de adaptación ante el cambio climático denominados TACC, y cuenta con la participación de empresas, universidades y asociaciones gremiales como la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT) de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Centro de Investigación, Desarrollo e Innovación de Estructuras y Materiales (IDIEM) de la Universidad de Chile, la Universidad de Santiago de Chile (USACH), ACCIONA, Echeverría Izquierdo, Melón, INVES, CINTAC, Revaloriza, Recylink, VerdeActivo, WatGen y Kaptus.

Paula Urenda, gerente general de la CChC indicó durante la primera jornada “El cambio climático sin duda está modificando la manera en que estamos habitando nuestras ciudades y representa un enorme desafío a escala global. Satisfacer las necesidades de acceso a la vivienda y aportar al logro de ciudades más sostenibles y a su vez responder al cambio climático, claramente son desafíos muy importantes para el sector de la construcción. Necesitamos avanzar en productividad y sostenibilidad ambiental, y la construcción tiene una oportunidad de protagonizar, tanto los procesos de adaptación y resiliencia de las ciudades, como también la mitigación de las emisiones”. 

Construye Zero, con una mirada a tres años busca generar un impacto en el sector como elevar los estándares que se requieren para dar cumplimiento al compromiso de carbono neutralidad al 2050, con un impulso en el desarrollo y masificación de nuevas metodologías colaborativas y tecnologías digitales; junto a la reconfiguración de nuevos modelos de negocio, todo esto con el potencial de dar un nuevo impulso al rubro que ha perdido dinamismo.

La directora de Innovación de la U. de Chile, Anahí Urquiza, una de las expositoras del lanzamiento destacó la importancia de este proyecto para la Casa de Bello. “Este proyecto es tremendamente importante para nosotros como Universidad porque nos permite acoger una colaboración entre diferentes instituciones de educación superior, el sector privado y el sector público, para abordar uno de los grandes desafíos que tenemos hoy día: cómo avanzar y dar un salto significativo en la construcción para lograr que sea sustentable, para reducir las emisiones, para avanzar en economía circular y al mismo tiempo, para lograr que podamos solucionar los problemas y las necesidades que tiene nuestra población”.

“Quiero destacar el tipo de instituciones que este programa ha logrado convocar, hay una pluralidad de empresas que suelen competir, sin embargo, acá se juntaron para abordar una problemática en común. Y esta problemática, es la que originó el Programa Tecnológico de Transformación Productiva ante el Cambio Climático del cual Construye Zero es parte”, señaló durante la jornada Fernando Hentzchel, gerente de Capacidades Tecnológicas de Corfo. 

El programa contempla proyectos que permiten medir y monitorear las distintas soluciones que forman parte de Construye Zero, como es el caso de las plataformas que permiten la integración y gestión de información tales como el Pasaporte de Materiales P+, el Gemelo Digital y la Plataforma de optimización en eficiencia energética. Por otro lado, señala Daniela Vásquez, gerente general de Construye Zero “se desarrollará un laboratorio de resiliencia de los materiales de construcción, así como también, un módulo sin emisiones, fachadas prefabricadas industrializadas, impresión 3D con mezclas que consideran reutilización de productos locales, además de testeo y aprendizaje relativos a soluciones constructivas prefabricadas de hormigón y madera. Finalmente, con el objetivo de lograr autonomía energética en viviendas, existe un proyecto que considera el prototipado y validación de un módulo de generación fotovoltaica off-grid”.

Para conocer más detalles sobre los proyectos pueden ingresar en:

Más de 30 equipos universitarios diseñarán las viviendas sociales del futuro

Los grupos, conformados por estudiantes de diferentes universidades de todo el país, diseñarán proyectos de viviendas sociales innovadoras y sustentables. 

Son 34 los equipos de 16 universidades de todo el país los que serán responsables de diseñar las viviendas sociales del futuro a través del Desafío NetZero 2030, concurso para estudiantes de pregrado de arquitectura y carreras afines a la construcción, que busca generar un proyecto de vivienda social, considerando el consumo neto de energía, emisiones netas de CO2, industrialización y la economía circular como sus pilares fundamentales.

En una jornada online, encabezada por Construye2025 y el Colegio de Arquitectos de Chile, fueron presentados los equipos inscritos y se dio a conocer el terreno donde deberán diseñar los proyectos. El sector elegido es Isla Cautín, emplazada en la comuna de Temuco y colindante con Padre Las Casas, en La Araucanía, por lo que los concursantes deberán tomar en cuenta las características y necesidades propias de la zona. 

Marcos Brito, gerente de Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción, junto con Natalie Mollenhauer, arquitecta y directora del concurso, indicaron que los prototipos también deberán ir en línea con el Programa de Integración Social y Territorial del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (DS19), el Plan de Descontaminación Atmosférica (PDA) del Ministerio del Medio Ambiente y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la 

ONU. De esta manera, “no sólo estaremos avanzando en estos objetivos, sino también en ser un aporte para paliar el déficit de viviendas, que supera las 650 mil unidades a nivel nacional”, destacó Brito. 

Por su parte, Beatriz Buccicardi, presidenta del Colegio de Arquitectos, indicó que “este concurso es un gran desafío, porque nos ayuda a generar un ecosistema que apoye a los futuros profesionales para que puedan enfrentar los desafíos que nos impone el cambio climático. Es un desafío para la academia, tanto en la formación como en la investigación; para los proveedores de materiales, quienes deben avanzar hacia prácticas cada vez más sostenibles; y también al sector de la construcción, entregando profesionales cada vez más empoderados que puedan proponer diseños y concretar construcciones NetZero”.

Los protagonistas

Los equipos están conformados por dos o más estudiantes de arquitectura y otras carreras ligadas a la construcción de las universidades de Santiago, de Chile, Pontificia Universidad Católica, Tecnológica Metropolitana, UNIACC, del Desarrollo, de La Serena, Católica del Norte, de las Américas, del Bío-Bío, de Viña del Mar, San Sebastián, Mayor (sede Temuco), Autónoma (sede Temuco) y Austral, planteles que brindarán el acompañamiento necesario a los alumnos para desarrollar los proyectos que serán presentados al jurado.

Pablo Vera, estudiante de arquitectura y capitán de uno de los equipos de la Universidad Mayor, indicó que “como equipo estamos emocionados por participar en este concurso de vivienda Netzero. Creemos firmemente en la importancia de la innovación en la construcción de viviendas sociales, especialmente en la región de La Araucanía, donde existe una gran necesidad de soluciones habitacionales sostenibles y accesibles para la población”. En tanto, Paula Araya, capitana del equipo de la U. de la Serena, agregó que “nos motivaron a ser parte de la temática, tanto su problemática habitacional como su énfasis en las estrategias bioclimática, que es algo tan importante para el futuro del país y del mundo”.

Asimismo, Sarai Toledo, estudiante de arquitectura y capitana de uno de los grupos de la Universidad de Santiago, comentó sobre su motivación y la de sus compañeras para conformar un equipo y participar en este desafío. “Nos llamó bastante la atención el tema de la sustentabilidad, creemos que es una de las bases para un mejor vivir, que la implementación de ésta en la arquitectura es completamente relevante y prudente en el contexto actual y en cómo nos puede entregar soluciones”, enfatizó. 

Por último, Carolina Garafulich, presidenta de Construye2025, indicó que estos equipos pasan a ser parte de los constructores del nuevo mundo, haciendo hincapié en el impacto positivo que tendrá esta experiencia en nuestro país, ayudando a las instituciones y la sociedad en general – a través de sus proyectos- a cómo alcanzar la carbono neutralidad para el 2050. 

El concurso se desarrollará durante todo este año, conociéndose a los ganadores en noviembre, quienes realizarán una pasantía en la Universidad de Nottingham, en el Reino Unido, además de premios en dinero para el segundo y tercer lugar. 

El equipo de CES se prepara para visitar en terreno los edificios certificados

Nuevamente, los profesionales de CES están agendado visitas a terreno para verificar el comportamiento de los edificios certificados en regiones.

Como ya es habitual, el equipo de CES tiene preparado un programa de visitas a regiones, que este 2023 incluirá a la Araucanía, Magallanes, Maule y Ñuble, Arica, Coquimbo, Los Ríos, Atacama y Antofagasta.

El objetivo de estas visitas es poder verificar en terreno el comportamiento de los edificios ya certificados con CES y medir los consumos de energía y agua, principalmente.

De esta manera, durante abril CES iniciará su programa con una visita a Magallanes. Hernán Madrid, jefe de CES visitará el Hospital Clínico Dr. Augusto Easmann de Puerto Natales, que fue el piloto para el desarrollo de la versión CES Hospitales, aunque este hospital no ha sido certificado. Sin embargo, como cuenta Madrid ahora hay un proyecto para certificación de un proyecto de ampliación de este recinto hospitalario. La versión de CES Hospitales se desarrolló como una respuesta al programa de desarrollo de infraestructura hospitalaria del Ministerio de Salud. 

Madrid, además, tendrá una reunión con la Cámara Chilena de la Construcción de Punta Arenas y la Dirección de Arquitectura del MOP regional. 

A ello se suma una visita al aeropuerto de Puerto Natales, que fue uno de los pilotos para el desarrollo de la versión CES Aeropuertos. 

Huella de carbono: requerimiento voluntario del Manual CES 1.1 

Uno de los nuevos requerimientos incorporados en la versión 1.1 del Manual CES, que será de uso obligatorio para proyectos nuevos inscritos a partir del 1 de abril de 2023, es la huella de carbono en la operación. Hernán Madrid cuenta los objetivos tras esta incorporación.

A partir del 1 de abril, comienza a ser obligatorio para la inscripción de proyectos nuevos, el uso del Manual CES versión 1.1, lanzado en enero de este año.

Entre los cambios que introduce esta nueva versión, está el requerimiento voluntario de huella de carbono de los proyectos de edificación, la que se mide durante la operación del edificio, no aborda en esta versión todo el ciclo de vida.

“Este requerimiento nuevo está muy en línea con los requerimientos existentes, porque utiliza la metodología base de los requerimientos de consumo por energía y de energía renovable no convencional, para estimar la reducción de emisiones basado únicamente en la operación del edificio”, precisa Hernán Madrid, jefe de CES.

Este es un punto de partida para ir avanzando en la medición de huella en el ciclo completo, con miras a los compromisos de carbono neutralidad, de modo de poner a disposición de los equipos de proyecto esta herramienta en la certificación nacional y “esperamos que en la siguiente versión podamos incorporar criterios de huella de carbono en el ciclo completo de la edificación. Este es el primer paso”, dice Madrid.

Cómo se calcula

Desde la mirada de CES, el requerimiento de huella de carbono está construido, al igual que los requerimientos de demanda y consumo de energía, es decir, comparando un caso de referencia con el edificio que finalmente se diseña y construye, con todas las estrategias de mejoras incorporadas. “Ello permite estimar la cantidad de emisiones para el caso real y de referencia y, de esa manera, con esos dos valores, se calcula un porcentaje de reducción, que es lo que finalmente tenemos como un indicador dentro del requerimiento y, además, como un indicador dentro de los reportes finales e implementado como uno que aparece en el sitio web”, explica Madrid.

Dichas reducciones se hacen a través de diseño pasivo y también de diseño activo. 

Bonos verdes

Como especifica el jefe de CES, hasta el momento el cálculo para reportar bonos verdes se hacía fuera del sistema, por lo que a contar del comienzo del uso de la versión 1.1, “aumentamos la robustez de lo que estamos reportando, porque tiene el proceso regular de certificación, que incluye una evaluación tercera parte, independiente. Hasta el momento, la evaluación de reducción de emisiones para reportar a los de bonos verdes se hizo con la misma metodología, pero sin la participación de la evaluadora.

¿Cómo aporta esto al camino de la descarbonización? “Aporta muy significativamente”, a juicio de Madrid, “porque ponemos a disposición de todos los proyectos una herramienta de cuantificación validada a nivel internacional”. En ese sentido, esta actualización permite ir avanzando y marcando el camino, “porque a lo que queremos llegar, idealmente en la versión 2 del Manual, es a incorporar la huella de carbono en el ciclo completo de la edificación”, sostiene.

La incorporación del requerimiento voluntario de huella de carbono se suma a otras iniciativas del sector, como el proyecto Pasaporte de Materiales del Centro Tecnológico de la Construcción (CTeC) y Chile GBC, y Construye Zero, también del CTeC. 

Ambos proyectos abordan “la parte de la que hasta hoy no tenemos información suficiente en Chile para abordar, que son los procesos productivos de materiales. De manera que, si esa información se empieza a poblar y empezamos a tener datos de los distintos tipos de materiales, va a ser mucho más sencillo y factible avanzar hacia el ciclo completo de la edificación”, cree el ingeniero.

Por esa razón, CES ha estado involucrada como patrocinadora en ambos proyectos, “porque son iniciativas que vienen a complementar aspectos que nos faltan a nivel país”, explica Madrid.