En las comunas de Purén, Lautaro y Cholchol se ubican los proyectos que fueron reconocidos por sus características de sustentabilidad.
Durante la ceremonia de entrega de la primera versión del Premio CES, establecimientos educacionales ubicados en las comunas de Purén, Lautaro y Cholchol, en la Región de La Araucanía fueron premiados con el primer, segundo y tercer lugar, respectivamente, en la categoría Proyecto Precertificado.
La Escuela Básica Huintranlebu, perteneciente a la Municipalidad de Purén, contó con la Seremi Mineduc Araucanía como Unidad Técnica y obtuvo la precertificación CES con 81,5 puntos. Dentro de las características de sustentabilidad que destacaron en el proyecto, se contó un 42% de reducción en la demanda de energía y 21% menos de horas de disconfort, además de 70% de ahorro de consumo de agua. Hasta la premiación, realizada el pasado 04 de septiembre, llegó el alcalde de la comuna, Jorge Rivera, a recibir el premio.
El segundo lugar de esta categoría fue para el Liceo B-15 Jorge Teillier, que pertenece a la Municipalidad de Lautaro, su Unidad Técnica fue Seremi Mineduc La Araucanía y la Dirección de Arquitectura MOP La Araucanía. Recibió la precertificación con 79,5 puntos en el sistema y dentro de las características de sustentabilidad que destacaron en el proyecto, se contaron reducciones de 43% en demanda de energía, 57% en consumo de la misma y 13% en horas de disconfort, además de 56% de ahorro de consumo de agua y fue Esteban Montenegro, jefe del Área Arquitectura del Departamento de Infraestructura Escolar del Ministerio de Educación, el encargado de recibir el premio otorgado por la certificación nacional.
Finalmente, el tercer lugar fue para la Escuela Rural Rucapangue, cuyo galardón fue recibido por el alcalde la comuna de Cholchol, Luis Alfredo Huirilef. El proyecto, obtuvo la precertificación con 76,5 puntos y la Unidad Técnica fue Mineduc Seremi La Araucanía. Dentro de sus características de sustentabilidad descritas en el proyecto, destacaron reducciones de 20% de demanda de energía, 19% de horas de disconfort y 41% de ahorro en consumo de agua.
De acuerdo a Esteban Montenegro, la obtención de estos reconocimientos “viene a coronar un trabajo que iniciamos el 2008, cuando nos integramos al trabajo del Instituto de la Construcción que buscaba instalar una certificación medioambiental de edificios en Chile. Y una vez lanzada la Certificación CES, nos comprometimos con su desarrollo y consolidación, incluyéndola como un requisito en todos los nuevos proyectos financiados por el Mineduc”.
La aplicación de criterios de sustentabilidad, confort y eficiencia energética en los espacios educativos es vital, dados sus beneficios económicos, ambientales y sociales, agrega el profesional. “Especialmente relevantes son el rol pedagógico que juegan los edificios escolares sobre su comunidad educativa, y a la numerosa evidencia que demuestra el impacto positivo de las condiciones de confort sobre el desempeño de alumnos y profesores”, señala.
Desde la cartera de Educación, indican que CES es una herramienta que asegura que las inversiones en infraestructura escolar cumplan con adecuados estándares a este respecto, entregando espacios educativos dignos, saludables, confortables y eficientes.
“Tenemos varios proyectos ya ingresados a la certificación y otros cuantos en carpeta, por lo que seguiremos trabajando para aportar desde nuestro ámbito a la consolidación de CES como un estándar de calidad para la edificación pública”, finaliza Esteban Montenegro.