El primer recinto penitenciario con requerimientos de eficiencia energética en Chile

En Talca se encuentra el Recinto Modelo La Laguna, centro de reclusión en el que se debieron considerar los requerimientos de seguridad que solicita Gendarmería para un recinto de estas características, con los de eficiencia energética.

La región del Maule obtuvo por tercera vez consecutiva el primer lugar de los Premios CES, con el Recinto Modelo Educación y Trabajo Edificios ADE-DEP y ASA-ADI. Ubicado en La Laguna, Talca, a orillas del río Lircay, el centro es un recinto penitenciario donde los internos, tras demostrar cambios en una unidad penal tradicional, llegan para terminar su condena, adquiriendo diversos oficios. 

El centro cuenta con varios edificios de más de 6.950 metros cuadrados de superficie construida total en su conjunto y albergará a 2.320 internos. Talca fue elegida para la realización de este enorme proyecto por el porcentaje de sobrepoblación penal de la región y la antigüedad de los recintos existentes. El proyecto del recinto fue diseñado por luis vidal + architects, construido por Acciona, asesorado por la arquitecta Tatiana Vidal y evaluado por Ecosustenta; y es uno de los recintos penitenciarios más modernos del continente y el más grande del país.

Juan Carlos Barros, arquitecto asociado de luis vidal + architects, oficina a cargo del diseño del Recinto Modelo Educación, compartió que el enorme desafío que ha conllevado este proyecto fue posible por la experiencia internacional del estudio, el cual tiene sedes en España, República Dominicana y Estados Unidos. Barros comentó también que es la primera vez que se construye en nuestro país un recinto penitenciario con requerimientos de eficiencia energética. “Se aplicaron diversos criterios de sustentabilidad y adecuación térmica, según la condición de cada uno de los edificios del complejo, donde el requerimiento de seguridad debía primar ante todo. Fue necesario readaptar las soluciones constructivas de envolvente tomando en cuenta esta condición y cruzarlo con los requerimientos del estudio de eficiencia energética. Para conseguirlo, fue necesario un trabajo intenso junto con el especialista y asesor CES, logrando implementar condiciones dirigidas a la eficiencia y ahorro energético sin olvidar -por supuesto- los requerimientos de seguridad exigidos por Gendarmería”, aseveró el arquitecto.

Subrayó que donde mayormente se pudieron implementar condiciones dirigidas a la eficiencia y ahorro energético fue en el edificio de salud y administración interna y en los edificios del sector externo, que recogen las áreas administrativas, las dependencias del personal y el área de visitas. 

También se implementaron medidas pasivas como el aprovechamiento de la radiación solar y asegurar la continuidad de la envolvente térmica, pero lo más relevante, explica Juan Carlos Barros, fue la integración de medidas activas como instalaciones eficientes, una planta de generación fotovoltáica y paneles solares térmicos. 

Francisca Echevarría de Acciona reconoce que la experiencia de trabajar con CES fue desafiante y enriquecedora, a la vez. Por bases de licitación, tenían que trabajar en dos edificios y lograr un nivel de certificación destacado. 

A su juicio, en el edificio ADE-DEP fue más simple incorporar los requerimientos. Sin embargo, “en el ASA-ADI fue un poco más complejo y desafiante, porque prevalecía la seguridad ante el requerimiento CES”, precisó Echeverría. Especificó que en ASA-ADI lo más complicado fue el trabajo con las ventanas, que si bien son termopanel, “lograr un balance entre la seguridad y la funcionalidad fue complejo, lo que se pudo lograr gracias a una doble hoja de policarbonato, con una cámara de aire interior”. También comentó que lograr la grifería antivandálica y de ahorro de consumo de agua, hizo que el equipo tuviera que investigar más en el mercado, para poder dar con este requisito.

Por su parte, el teniente coronel y oficial de Gendarmería, Edgardo Cañiulef, también demostró su orgullo por el premio y destacó cómo con estas características se genera un mejor clima laboral dentro del centro penitenciario y favorece las condiciones de habitabilidad de quienes residen y trabajan en él. “Estamos muy contentos de tener el privilegio de utilizar este edificio, el confort y las condiciones de trabajo que son las propicias para que el personal de Gendarmería tenga las condiciones dignas y adecuadas para que cumpla con su labor. Y es una labor que, por lo general, es dura, por el tipo de servicio que nosotros prestamos a la comunidad, en la relación y la interacción con nuestros usuarios”, agregó.

Asimismo, Carlos Valverde, inspector fiscal de la Dirección de Arquitectura del MOP de la región del Maule, compartió que la experiencia de certificar el edificio con CES “trae a la edificación pública altos estándares de confort, tanto para el usuario como también permite que en la vida útil del edificio, que en este caso es una cárcel, se incrementa para el Fisco a través de los años de uso que se le dan a este tipo de establecimientos que abarcan 60, 80 años e incluso más. Es un ahorro permanente, establece confort lumínico, de temperatura, acústica y de eficiencia energética en cuanto a consumo de clima, de calefacción”. 

Y agregó: “En específico para este proyecto, nos vimos enfrentados a la dificultad de poder implementar las distintas materialidades que pide poder alcanzar o bien bajar la transmitancia térmica del punto de vista constructivo. Dentro del proyecto contemplamos dos áreas: principalmente la zona interna, que viene a ser el recinto amurallado donde están los internos y la zona externa, que es el edificio administrativo. Y en el área donde están los internos se requirió elevar la seguridad”.

Con dicha separación se decidió certificar el área ASA-ADI de la zona interna y el ADE-DEF para la externa. En la primera, por ejemplo, se resolvió poner un termo panel de policarbonato con un marco metálico de fierro. Esto permitió mantener la seguridad -porque no hay vidrio- y, a la vez, se mejoró la transmitancia. Y en el exterior, se mejoraron los detalles constructivos para asegurar el nivel destacado de la certificación. “Esto llevó a la constructora a asesorarse y a desarrollar de mejor manera las terminaciones y sandwich constructivo. Producto de todas las mejoras añadidas se avanzó en el puntaje de certificación, permitiéndonos llegar al sobresaliente”, añadió Valverde.

“Nosotros como Dirección de Arquitectura del MOP venimos trabajando desde el 2017 en desarrollar documentos que nos permitan elevar al momento de generar la licitaciones, el estándar de las edificaciones. Este premio nos viene a confirmar que vamos por un camino correcto y que tenemos que seguir avanzando por esta línea”, concluyó.

Centro Penitenciario La Laguna: proyecto de reinserción social más grande y sustentable

Ubicado en la zona norte de Talca, el recinto construido por Acciona, mejorará sustancialmente la infraestructura penitenciaria gracias a la asesoría CES y el trabajo colaborativo de todos los profesionales que aportaron para lograr una edificación eficiente y amigable con el entorno.

Seguridad, vanguardia y tecnología son los conceptos que mejor describen al Centro Penitenciario de Educación y Trabajo “La Laguna”, ubicado en Panguilemo, Región del Maule. El proyecto diseñado por Luis Vidal + Arquitectos, construido por Acciona, asesorado por la arquitecta Tatiana Vidal y evaluado por Ecosustenta, cuya Unidad Técnica fue la DA MOP del Maule -que cuenta con precertificación CES- se convertirá en uno de los recintos penitenciarios más modernos del continente.

Con más de 1.500 cámaras de televigilancia interna, implicó un gran trabajo de coordinación entre las diversas disciplinas y actores que lo hicieron posible en los 60 mil metros cuadrados que albergarán a más de dos mil internos. “Acá había interés y ganas de aprender, porque hubo que hacer varios cambios de materiales. Uno en obra va tomando decisiones que apuntan, por ejemplo, al control del deslumbramiento”, precisa Tatiana Vidal.

Los internos contarán con gimnasio, venusterios, hospital penal, escuela y central de producción de alimentos. Todo de primer nivel gracias a los atributos de calidad interior y eficiencia energética, los materiales que se utilizaron para la construcción y el trabajo mancomunado de diversos profesionales. “Trabajamos y acompañamos durante unos 20 meses. La principal complejidad era que el edificio debía estar dentro del perímetro de seguridad. Además, tuvimos que pasar de los vidrios al policarbonato para combinar el aspecto técnico con la seguridad requerida”, explica la asesora CES.

El policarbonato debía ser transparente y, por lo tanto, hubo que trabajar en el índice de tramitación lumínica del policarbonato para poder simularlo térmicamente.

Si bien la estructura original era de hormigón prefabricado, hubo que revestir por dentro y agregar celulosa proyectada, un elemento con menores emisiones en la fabricación que el poliestireno expandido. Además, se instalaron celosías de control solar exterior; se utilizaron vidrios tinteados y se pusieron lamas metálicas en las oficinas.

“En obra, a veces, cuesta comunicar a tiempo las decisiones respecto de los equipos de ventilación, porque tiene que apuntar a cierto caudal y cierto porcentaje de filtraje. Pero, la gracia de la certificación es que tienes que cumplir con los estándares que corresponden, con información avalada. Adicionalmente, pudimos lograr ahorros importantes gracias a las griferías y los inodoros”, comenta Vidal.

Energía y paisajismo

El centro penitenciario más grande del país será un recinto modelo de educación y trabajo, porque está pensado no solo para la custodia, sino que también para la reinserción de las personas privadas de libertad. En este sentido, destaca también el paisajismo con utilización de aguas grises. El proyecto incluyó una planta de tratamientos de agua residuales y un conjunto de placas fotovoltaicas que generarán energía verde, para lograr un centro penal amigable con el medio ambiente. “Un paisajismo nativo y respetuoso que se suma al uso de energías renovables, gracias al sistema fotovoltaico instalado para ahorrar energía eléctrica”,cuenta Vidal.

Otra de las particularidades de La Laguna es que se compone de módulos de baja altura, con mucha luz y espacio al aire libre, lo que lo diferencia de otros recintos penitenciarios.

El costo total de la obra con capacidad para albergar a 2.320 internos superó los MM$120.000.

Cómo se logró la construcción de la piscina temperada más sustentable de Chile

Gracias a la incorporación de criterios de sustentabilidad y eficiencia energética, quienes trabajaron en el diseño, ingeniería y construcción de la Piscina Temperada de Talca lograron disminuir el consumo de electricidad, agua y calefacción, alcanzando 70 puntos del total de 100 que otorga la certificación CES. 

12 de Agosto del 2021/ SANTIAGO Piscina Municipal de Talca FOTO: Mauricio Mendez

La Piscina Temperada de Talca fue la ganadora en la categoría Edificio Certificado del Premio CES 2021. El nivel sobresaliente del puntaje obtenido tras su evaluación fue el resultado del trabajo coordinado de varios especialistas, que hoy destacan con orgullo las características de esta verdadera joya, impulsada por la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas en la Región del Maule.

Técnicamente, el recinto ofrece un alto confort término pasivo (16% de reducción de horas de disconfort), una reducción de 29% en la demanda energética para climatización e iluminación y una reducción de más de 49% en el consumo de agua. Mandatada por el Gobierno Regional del Maule y el Instituto Nacional del Deporte, la piscina fue entregada por la Dirección de Arquitectura a comienzos de 2020 y ya está lista para acoger a los usuarios maulinos. 

“El espacio donde iba la piscina era el que requería mayor atención. Estamos muy contentos de haber podido aplicar todas las estrategias que se definieron desde un comienzo en el diseño”, comenta Fernanda Soto, asesora CES del proyecto. Según la arquitecta, el diseño pasivo fue muy importante a la hora de lograr los puntos que se necesitaban para obtener la certificación y fue muy de la mano del trabajo de las distintas especialidades.

“Pudimos entregar la mayor calidad en el diseño de los lugares ocupados como la piscina, los camarines y otros de uso menos permanente, pero que no dejan de ser importantes, como la oficina de administración y la sala de musculación”, señala Fernanda Soto. 

Piscina Temperada de Talca.

Un modelo para replicar

El proyecto en el que se invirtieron más de 2.500 millones de pesos, consideró la construcción de una piscina de 25 por 18 metros, con 8 carriles, gradería para 220 personas, camarines, sala de máquinas, hall de acceso y áreas verdes. “Estamos muy contentos y orgullosos de haber contribuido al financiamiento de la primera piscina sustentable. Nos gustaría poder financiar estas iniciativas en distintas comunas de la región, porque creemos que hay otras comunas que también requieren de estos proyectos”, expresa Cristina Bravo, gobernadora regional del Maule.

Con un moderno sistema para temperar el agua entre los 26 y los 27 grados, el proyecto destaca especialmente por su climatización de alto rendimiento. “La eficiencia energética de CES se nota en el comportamiento interior de los edificios. Gracias a su confort, no sientes ni frío ni calor, un confort muy especial. Si vas a la piscina lo vas a sentir”, asegura Ervin Castillo, director regional de Arquitectura del MOP Maule.

Definitivamente, un proyecto poco convencional, tal como dice Pedro Bartolomé de Bis Arquitectos, debido a las condiciones de humedad y temperatura naturales en una infraestructura como esta, las que requirieron, por supuesto, de un uso racional de los materiales y las energías. “Un edificio de bajo impacto, confortable, con estrategias de ahorro en el consumo hídrico, envolvente térmica continua, colectores de agua caliente sanitaria, estrategias de control solar pasivo, iluminación y ventilación natural en todos los recintos habitables, artefactos de bajo consumo”, enumera el arquitecto.

Asimismo, las estrategias de control solar pasivo, los artefactos de bajo consumo, y las estrategias de climatización fueron aspectos destacados por los responsables de la construcción del edificio maulino. “El sistema de climatización fue pensado con equipos eficientes y de bajo consumo; y la envolvente del edificio tiene aislación térmica, lo que hace que la climatización interior sea más eficiente”, comenta Ángel Bartolomé de la Constructora ABC Limitada. 

En condiciones medioambientales como las que caracterizan a la Región del Maule, este tipo de infraestructura debiera ser generalizado, según el director Regional Instituto Nacional del Deporte, Sebastián Pino, quien enfatiza: “es un lujo para nosotros poder tener la administración de esta instalación. Ojalá se puedan replicar en otros servicios públicos estas iniciativas”.