Centro de salud construido en una zona de difícil acceso logra alto puntaje

El diseño optimiza el uso de recursos naturales y estandariza la construcción para facilitar los procesos constructivos, lo que lo llevó a obtener una precertificación sobresaliente.

El proyecto El Divisadero se encuentra en la región de Coquimbo, en la comuna de Punitaqui, en un lugar de difícil acceso, bastante remoto, a aproximadamente 700 metros de altura y en una zona predominantemente rural. “Es un área de un clima complejo, sin muchas lluvias, por lo que la intención de tener bajo requerimiento hídrico fue una de las premisas del proyecto”, precisa Rodrigo Escobar, ingeniero asesor CES precertificación de la obra.

Pese a estas características, el proyecto logró una precertificación “sobresaliente” con 74,5 puntos de 100, “lo cual es un tremendo mérito para ser un edificio público emplazado en lugar extremo”, precisa Christian Araya Castor, arquitecto de la Universidad de Santiago, socio fundador del estudio de arquitectura Araya Arquitectos, que ganó la licitación para el diseño de Reposición de la Posta de Salud Rural el Divisadero el año 2022.

La posta es pequeña, de 300 m2, por lo que el equipo se preocupó de que llevara bastantes estrategias pasivas. Dentro de ellas, “pusimos mucho énfasis en lograr una muy buena iluminación natural, porque son zonas más bien de climas cálidos, corríamos el riesgo de que al dejar que el sol ingresara a los recintos genere sobrecalentamientos, deslumbramientos que iban a hacer que los equipos tuvieran un mayor consumo; entonces, procuramos que la iluminación natural tuviera un muy buen desempeño, y obviamente, controles de todos los posibles ingresos de sol y deslumbramientos que ocurrieran en la zona”, precisa Rodrigo Escobar.

Otra característica del proyecto es que se trabajó con ventilación natural, creando una suerte de chimenea solar, con la cual se aseguró que haya un flujo de aire continuo en los espacios regularmente ocupados y se intentó que ese sistema de ventilación contara con un respaldo censado de CO2, para que los sistemas se activen en caso de que los sistemas de ventilación natural no fueran lo suficientemente potentes como para generar los caudales mínimos. El proyecto tiene una envolvente térmica en cubierta, muros, pisos; ventanas termopanel, protecciones solares en sus fachadas más expuestas y cumple con todos los requerimientos necesarios del sistema CES. 

Como señala el asesor CES, “en términos de agua, nos enfocamos en obtener un óptimo desempeño y en el caso del proyecto, logramos sobre un 70% de reducción de consumo. Eso fue muy importante, fue tan bien recibido por todos: por el mandante y por la oficina de arquitectura. En este caso, Christian Araya estuvo súper dispuesto durante todo el proceso de diseño a abordar todos los requerimientos CES, fue un trabajo súper bien coordinado. La posta, sin duda, será un gran aporte para la comunidad”.

Por su parte, el arquitecto Christian Araya Castro, cree que “una de las principales virtudes es que hemos logrado, junto al equipo de especialistas, desarrollar un diseño que estratégicamente optimiza al uso de recursos naturales y estandariza una construcción facilitando procesos constructivos, así su emplazamiento, sistema constructivo, elección de materiales, orientaciones de recintos y geometría del volumen, nos han permitido lograr un diseño rotundo de partido general en donde la expresión formal siempre está declarando silenciosamente su función o rol para el confort de los recintos”.

Comenta que es un proyecto emplazado en un lugar de difícil acceso, con la particularidad de estar ubicado en una localidad que no cuenta con agua potable; en un paisaje urbano-territorial de escasez, en donde no es posible encontrar alguna sombra durante el día y donde los lugares de encuentro y ocio solo se dan al interior de las construcciones. En ese sentido, Araya comparte que la nueva posta de salud rural viene a regalar un uso y reconocimiento al espacio público de escasez y hasta hoy no vivido, generando lugares de encuentro en sombra (aleros), regalando espacios públicos de expresión religiosa cultural (explanada frente a la capilla), y como pieza de paisaje, consolidando la delimitación de la actual plaza cívica del Divisadero, construyendo una tercera fachada, siendo la cuarta el camino ruta D-69 desde el cual llega a esta localidad.

Más allá del puntaje obtenido, Araya considera que es demostrativo el hecho de que el Estado pueda entender que sí es factible realizar una buena arquitectura eficiente y con costos controlados en edificios públicos, y que debieran ser estas obras públicas las que lideren este tipo de arquitectura. “Su relevancia es que creemos y queremos que estas certificaciones, que hoy, además, son exigencias en contratos públicos con el Estado, en la mayoría de los nuevos proyectos, cimienten el cambio en la concepción de bases, términos de referencia y criterios de diseño de edificios públicos. Buscamos que lo que muchas veces se declara como principio en los criterios de diseño pueda tener coherencia con una propuesta innovadora”, añade.

Importancia del Manual CES

Rodrigo Escobar cuenta que el requerimiento de CES venía dado por las bases de diseño, sin solicitar un puntaje especial. “Conversando con el equipo de diseño, fue uno de los primeros temas que tocamos en nuestras reuniones de coordinación y, en definitiva, se transformó en la carta de navegación para todas las decisiones que tomamos como equipo: desde la aplicación de esta chimenea, de los sensores, del sistema de climatización, los monitoreos, la reducción de agua; todas esas decisiones fueron basadas en el Manual de Certificación. Este documento se vuelve algo súper relevante para la coordinación y el diseño integrado del proyecto. Fue una experiencia bastante grata trabajar con el equipo y nosotros ya tenemos experiencia, tenemos varios proyectos que han pasado por el proceso de pre certificación y certificación, entonces ya es como una herramienta de trabajo diaria. El Manual clarifica muchas de las estrategias, las cuantifica también, básicamente entrega los lineamientos para que todas las especialidades comprendan la importancia de la sustentabilidad y el aporte de sus propias especialidades”, dice. 

En Punitaqui hacen entrega del primer liceo “Sello” de la provincia

El Ministerio de Obras Pública entregó a la Municipalidad la obra terminada del Liceo Alberto Gallardo Lorca, el cual cuenta con un edificio de dos niveles, 22 salas de clases, salas para talleres, auditorio, gimnasio, entre otras instalaciones con estándares de calidad y con una certificación de energía sustentable. Del municipio dependerá ahora equipar el establecimiento para ser prontamente inaugurado.

En Punitaqui fue entregado al Municipio el primer establecimiento de educación ‘Sello’ de la Provincia del Limarí, denominación que fue creada por el Ministerio de Educación para determinar los más altos estándares de infraestructura que permita facilitar la implementación del Proyecto Educativo Institucional, mientras que desde la Dirección de Arquitectura entregaron a esta obra la Certificación Edificio Sustentable (CES), la cual se utiliza en todo tipo de obras y que significa que la iluminación permite un ahorro de entre 20 y 30% de los consumos básicos del edificio.

Se trata del Liceo Alberto Gallardo Lorca, el cual tuvo una inversión sobre los 8 mil millones de pesos, los cuales fueron financiados por el Ministerio de Educación y mandatados a la Dirección de Arquitectura del MOP.

La obra fue entrega con su infraestructura terminada, por lo que solo falta que la Municipalidad equipe las instalaciones para su pronta inauguración.

‘Como Ministerio de Obras Públicas estamos muy contentos de poder aportar al desarrollo y modernización de la educación pública de nuestra región con la ejecución de obras como el renovado Liceo Alberto Gallardo Lorca de Punitaqui. Se trata de un moderno edificio de dos niveles, con 22 salas de clases, salas para talleres, auditorio, gimnasio, nuevos patios, oficinas, comedor, entre otras instalaciones que permitirán contar con infraestructura de primer nivel para este liceo. Además de contar con la certificación de edificio sustentable’, señaló el Seremi de Obras Públicas, Luis Felipe Muñoz, quien también quiso destacar la importancia en materia laboral.

‘Acá se generaron cerca de 100 puestos de trabajos mensuales durante los más de 600 días que duró la ejecución de este gran establecimiento educacional para la comuna de Punitaqui, lo que sin duda aportó a la reactivación económica y empleabilidad en esta comuna rural del Limarí’, señaló.

Acto de entrega

Durante la tarde de este jueves 24 de febrero fue entregada la obra con la presencia de diversas autoridades nacionales y regionales, quienes recorrieron las modernas instalaciones.

Sobre estas mismas, el Delegado Presidencial Ignacio Pinto quiso destacar que ‘hay acceso para personas con discapacidad, hay distintos sistemas de eficiencia energética que permiten que las salas tengan mayor ventilación, que hoy en tiempos de covid es tremendamente necesario, existen una serie de detalles valiosos para el enriquecimiento formativo de los niños y niñas que van a llegar a este lugar’.

‘Es una tremenda noticia para Punitaqui, pero no solo para esta comuna, sino para toda la región, porque comienza a elevar los estándares de los centros educacionales en donde van a llegar los niños y jóvenes de los distintos lugares urbanos y rurales de la región de Coquimbo’, agregó la autoridad regional.

Por su parte, el Director Nacional de Arquitectura quiso hacer mención de la importancia de contar con este tipo de obras en la educación, ‘este edificio está muy bien armado, es una estructura bastante reforzada, tiene una muy buena solución de iluminación natural, y sobre todo diría que tiene buena arquitectura, hoy no basta con tener los mejores equipos electrónicos, es importante tener buenos espacios, ya que los espacios son los que permiten desarrollar una buena educación a todos nuestros alumnos’, señaló.

‘Yo destaco e insisto en la calidad espacial y arquitectónica, el cómo se van relacionando los espacios entre sí, las texturas y colores, esto no sigue los estándares típicos de otras escuelas y liceos, es bien particular, de hecho en el acceso tiene un mural realizado por el muralista ‘mono’ González, que da toda una impronta de colores bien bonitos que se contrastan con colores neutros’, agregó.

El alcalde (s) Mauricio Castillo declaró su satisfacción por la obra, manifestando el orgullo que sienten como administración municipal, ‘es un edificio fantástico que cumple todas las expectativas, pero también hay que pensar que este edificio será ocupado por niños vulnerables de la comuna, esto es un símbolo de emparejar la cancha, estamos dándole dignidad a los niños de la comuna, una comuna pobre y rural pero que siempre tuvo el deseo de darle lo mejor a sus alumnos’, indicó.

En la misma línea comentó que ‘no tenemos nada que envidiarle a otros colegios y recintos que se han construido, incluso del ámbito privado’.

Por último, Castillo quiso destacar al equipo humano que tendrá la misión y el honor de impartir conocimientos a los estudiantes punitaquinos de este establecimiento, ‘tengo la claridad que nuestro recurso humano, los profesores, docentes, paradocentes y todo el equipo administrativo, va hacer muy buen uso de las instalaciones para darles la mejor educación a los alumnos de la comuna’, puntualizó.

Fuente: El Ovallino