Ya está disponible la versión 1.1 del Manual CES

Tras un año y medio de trabajo y gracias al aporte del Convenio de Colaboración Técnica y Transferencia de Recursos entre la Subsecretaría de Energía, la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas y el Instituto de la Construcción, y a la amplia participación de los profesionales de la industria, se concretó la actualización del Manual CES.

Ya se encuentra disponible el Manual CES para edificios de uso público versión 1.1 versión 1.1, que incluye múltiples actualizaciones. Esta “no incorpora un cambio de visión y distribución entre las categorías, ya que, por ejemplo, las categorías de energía que pesaban del orden del 40% del total, sigue manteniendo ese porcentaje de relevancia dentro del modelo de certificación”, explica Hernán Madrid, jefe de Certificación Edificio Sustentable (CES), quien añade que en esta versión solo se hicieron ajustes en las metodologías y requerimientos. Aunque adelanta que “en la versión 2 esperamos incorporar una redistribución de los pesos relativos y nuevas categorías”, asegura.

Si bien los ajustes tienen relación y están en concordancia con la Ley de Eficiencia Energética y la Ley de Cambio Climático, no hay un nexo directo. “En general, los procesos de certificación voluntaria como el nuestro se van moviendo y mejorando el estándar promedio de la construcción en el lugar donde se aplican. CES ha permitido alcanzar un cierto estándar, por ejemplo en la categoría de energía, que ha aumentado respecto a lo que teníamos hace siete años”, dice el jefe de CES.

Por ello, en la actualidad, ya no son tan desafiantes los niveles de eficiencia planteados en la versión CES 1.0, eso nos permite establecer “que hay espacio para poder subir un peldaño y tener un poco más de exigencia en ese ámbito”, plantea Madrid, aunque reconoce que este escenario es solo para algunos requerimientos.

Cambios en la estructura 

Dentro de los principales cambios de estructura está la creación de una nueva categoría de innovación, que busca recoger dos elementos, según explica Madrid: 

  1. Reconocer estrategias de sustentabilidad implementadas en el edificio, pero que no estén formalmente estructuradas en un requerimiento del sistema de certificación.
  2. Reconocer un comportamiento mejor que el nivel máximo definido para un requerimiento. 

El puntaje asociado a la categoría de innovación se considera como un puntaje adicional, no relacionado con los 100 puntos máximos que existen en el sistema, si no que se redistribuyen los puntajes de requerimientos considerados bonus.

Un segundo cambio en la estructura es creación de la categoría Materiales y Residuos, la que reagrupa los requerimientos existentes relacionados, y que se encontraban distribuidos en otras categorías, por ejemplo los requerimientos de Energía incorporada y el de Agua incorporada pasan a formar el nuevo ARQ.M&R 8 Declaración Ambiental de Productos (DAP).

Cambios en requerimientos 

En general, se realizaron ajustes en la metodología y en las exigencias de algunos requerimientos. “Se requería de estos ajustes, ya que llevamos 7 años con el modelo de certificación vigente y muchos de los aspectos modificados ya se han transformado en un estándar de construcción”, argumenta Madrid. Algunas de las principales modificaciones son:

  • Aumento de exigencias de requerimientos energía

El principal cambio es el ajuste al caso de referencia para la evaluación de demanda de energía, consumo de energía y confort térmico pasivo. Este ajuste implicó la realización de un estudio específico para calibrar los niveles de mejoras considerando el nuevo nivel base, que incrementa principalmente el estándar de transmitancia térmica de muros y otros ajustes menores.

  • Nuevo requerimiento de huella de carbono en la operación

Se incorpora un requerimiento específico relacionado con la determinación de la reducción de emisiones de CO2 equivalente, comparando el caso de referencia y el real de diseño, durante la operación del edificio.

Este requerimiento constituye el primer paso en la línea de incorporación de la huella de carbono, y esperamos en la siguiente versión, ampliar la mirada hacia el ciclo de vida completo de la edificación.

  • Residuos

Las variables asociadas a residuos se incrementa la exigencia, porque “ahora vamos a pedir un plan de gestión de residuos como requerimiento obligatorio. La incorporación de reciclaje o reutilización será parte del requerimiento voluntario y está definido en la metodología cuándo lo considerará como válido”, afirma Hernán Madrid.

  • Paisajismo

Este requerimiento incorpora una precisión en la metodología, específicamente en la contabilización del área de paisajismo del edificio, la que debe ser área verde excluyendo, por ejemplo, paseos peatonales o superficies duras sin vegetación. 

Por otra parte, se precisó que independientemente de la superficie que tenga el área verde, se debe cumplir con el requerimiento obligatorio. Además, el requerimiento se hace extensivo a todo Chile y no solo a las zonas con un cierto nivel de lluvia. 

Cambios en metodología 

Se incorporaron cambios en las definiciones de las distintas zonas climáticas, lo que involucra varios requerimientos. Para esta versión 1.1 “se desagregaron zonas climáticas en las que contamos con antecedentes suficientes para constatar que una mayor precisión”, afirma Madrid. Por ejemplo, en la zonificación climática de Chile definida en la NCh1079, desde Puerto Montt al sur es la misma zona, “pero ahora tenemos datos suficientes para constatar que, tanto en características climáticas como en la latitud, tienen diferencias considerables para los requerimientos de la certificación. Un ejemplo es el acceso a la luz natural en Magallanes en relación a Aysén, las temperaturas a nivel de congelamiento, lo que afecta en los requerimientos de riego y paisajismo. Entonces, ese tipo de cosas se incorporaron dentro de la metodología de evaluación de los requerimientos”, precisa.

Como todos los desarrollos de CES, este proceso de actualización de la versión 1.1 se llevó a cabo a través del Comité Consultivo, que entregó los lineamientos y diversos Comités Técnicos, donde se evaluaron las propuestas de modificación de los requerimientos o ampliación. Luego, esta propuesta fue aprobada por el Comité Directivo. El financiamiento para el desarrollo de los estudios necesarios fue posible gracias al Convenio de Colaboración Técnica y Transferencia de Recursos entre la Subsecretaría de Energía, la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas y el Instituto de la Construcción.

El Manual CES versión 1.1 está disponible AQUÍ.

Nueva plataforma y Manual CES 1.1: dos grandes hitos para despedir 2021

Una plataforma más ágil y eficiente para la inscripción de proyectos, además de un renovado manual que incorpora nuevos indicadores mejorarán la certificación de edificios de uso público en Chile.

En agosto de este año comenzó la marcha blanca de la nueva plataforma de Certificación Edificio Sustentable que, en unos pocos meses, lleva 39 proyectos inscritos. Lanzada oficialmente el 10 de diciembre, ha sido bien recibida por asesores y evaluadores que hoy pueden enviar información de manera mucho más sencilla y estandarizada. “Solo nos queda ver el traspaso de algunos proyectos anteriores a la nueva plataforma, pero estamos felices de la acogida que ha tenido de parte de los usuarios”, afirma el jefe de CES, Hernán Madrid.

A contar del próximo año, todos los proyectos operarán en la nueva plataforma que, según cuenta Victoria Opazo, secretaria técnica de CES, que ha estado a cargo de mostrar el funcionamiento del nuevo sitio. “Ahora es posible tener un panorama más completo sobre las condiciones de los proyectos que se van pre certificando, considerando materiales del proyecto, sistemas de protección solar, etc.”, detalla.

Otro de las ventajas del cambio ha sido la automatización de los procesos “Esto funciona más rápido y, además, están la estandarización y la trazabilidad de la información. La idea era que quedara muy bien ordenada y segmentada. También se incorporó la posibilidad de levantar ciertos indicadores de los procesos: consumo de energía, emisiones de CO2, generación de residuos y consumo de agua, para poder mostrar la información de manera automática en el sitio web. Así es posible juntar, agrupar y tener indicadores globales de cómo se ha ido mejorando”, señala Hernán Madrid, quien destaca el aporte de CES en la cuantificación de indicadores.

Nuevo Manual CES 1.1

Cambios gráficos para también de forma incorpora el nuevo Manual CES 1.1 lanzado el 7 de diciembre, que incluye nueva iconografía, actualización de imagen y un reordenamiento de categorías donde hoy aparecen dos temas nuevos: “se creó la categoría de materiales y residuos para dar un nuevo énfasis a los materiales y su carga ambiental; y también apareció la categoría de innovación, lo que permite que aparezcan nuevas estrategias”, sostiene el jefe de CES.

Además, el nuevo manual incorporó cambios en los estándares del sistema de certificación. “En general, el sistema de certificación pone un caso de referencia, con el cual se compara el edificio que se diseña y construye, en algunos requerimientos el nivel de referencia se hace más exigente”, explica Hernán Madrid sobre la forma en que se evalúan los proyectos, en los que se consideran atributos como aislación térmica, envolvente, calefacción y enfriamiento.

“El Manual CES 1.1 sienta las bases para la cuantificación de emisiones de CO2 equivalentes, se hacen los cálculos de consumo en energía primaria y se eleva también el estándar asociado a consumo de agua. Junto con los indicadores asociados a residuos generados en obra, hay una desagregación de la zona climática sur extremo, es decir, se separa la Región de Magallanes de la Región de Aysén en términos de exigencias en los requerimientos”, concluye el jefe de CES.

Adicionalmente, el nuevo manual se pone en contexto frente a la futura calificación energética de edificios de uso público que podría entrar en vigencia antes de 2024.