Las claves del proyecto precertificado CES con el puntaje más alto en 10 años

Con un sobresaliente puntaje (90/100), el terminal de pasajeros del Aeródromo Teniente Julio Gallardo se posiciona como referente nacional en infraestructura aeroportuaria sustentable. Estrategias bioclimáticas, generación de energías renovables y un enfoque integral desde las primeras etapas de diseño fueron clave en este logro.

En febrero de 2025, el terminal de pasajeros del Aeródromo Teniente Julio Gallardo de Puerto Natales obtuvo la precertificación CES con 90 puntos, en la versión 1.1, el puntaje más alto alcanzado hasta ahora en esta etapa del proceso de certificación. Este proyecto, impulsado por la Dirección de Aeropuertos del Ministerio de Obras Públicas (DAP – MOP), representa un hito en la aplicación de criterios de sostenibilidad en infraestructura aeroportuaria en zonas de condiciones climáticas extremas.

“El proceso para obtener la precertificación CES en este proyecto fue largo y desafiante, pues requirió casi cuatro años de trabajo. Desde un inicio se pensó que el proyecto debía obedecer a altos estándares en sostenibilidad, net zero, eficiencia energética, entre otros aspectos”, explica Martita Molina, inspectora fiscal del estudio CES Aeropuertos.

Desde la etapa de prefactibilidad, el diseño se guió por decisiones informadas a partir de análisis específicos, como el uso de energías renovables no convencionales, estrategias de arquitectura bioclimática y un informe de requisitos CES, que permitió orientar el diseño hacia un cumplimiento óptimo de los requerimientos obligatorios y voluntarios de la certificación​.

Según Cecilia Palarino, asesora CES de la oficina Nórdica Ltda., el proceso comenzó con un diagnóstico del terminal existente y un análisis de referencias internacionales. “A partir de estos estudios iniciales, se diseñaron estrategias para optimizar el desempeño del edificio, considerando en todo momento el impacto económico de las soluciones propuestas”​, precisa.

Dado que las exigencias operativas y arquitectónicas de un terminal aeroportuario difieren de las de otros tipos de edificaciones contempladas en CES, se dificultó la aplicación directa de los requerimientos establecidos en los actuales manuales. Por esta razón, “el Terminal de Pasajeros Aeródromo de Puerto Natales se desarrolló como un proyecto piloto, en el cual se analizó la adecuación de los criterios CES al programa arquitectónico del terminal, sentando un precedente para futuras certificaciones en infraestructura aeroportuaria en Chile. Al ser el primero en su categoría, la experiencia adquirida en este proceso también servirá como base metodológica para el desarrollo del Manual CES Aeropuertos, actualmente en elaboración”, comenta Palarino.

La estrategia fue integral, tanto en lo técnico como en lo humano. Se incorporó un enfoque de diseño colaborativo con un equipo multidisciplinario que integró arquitectura, ingeniería, asesoría en sostenibilidad y especialidades aeroportuarias. Esto permitió avanzar desde una visión macro hacia soluciones específicas acordes al contexto geográfico y funcional del edificio.

Entre las decisiones clave que explican este alto puntaje, destacan:

  • Generación in-situ de energía renovable mediante aerogeneradores.
  • Envolvente térmica de alto rendimiento, iluminación natural y equipos de climatización con recuperación de calor.
  • Artefactos sanitarios de bajo consumo hídrico y paisajismo con especies autóctonas de bajo requerimiento.
  • Sistemas de monitoreo de consumo energético y gestión de residuos en construcción y operación.

“El puntaje obtenido es el resultado de un esfuerzo sostenido en cada decisión de diseño. El equipo asesor CES actúa como un eje de coordinación multidisciplinario, pero el diferencial está en el flujo de trabajo articulado entre todos los actores involucrados, y en los proyectos con altos puntajes se logra la integración efectiva de las estrategias en cada etapa del proceso”, añade Palarino​.

Los resultados hablan por sí solos: reducción del 46% en la demanda energética, 48% en el consumo total y 49% en la huella de carbono operacional. En agua, el ahorro alcanzó un 69% en consumo potable y un 44,4% en riego. A esto se suma una significativa mejora en la calidad ambiental interior, con un 85% de la superficie con excelente iluminación natural y un 92% de los recintos con acceso visual al exterior​. En materiales y residuos, se implementó un sistema de gestión de residuos en operación, con espacios destinados a la separación de materiales reciclables y un Plan de Gestión de Residuos para la etapa de construcción. Además, los indicadores de eficiencia en consumo energético y uso de agua permitieron la postulación al crédito de innovación.

El proyecto no solo sienta un precedente técnico, sino que también refuerza el valor de la sostenibilidad como eje rector de la infraestructura pública en Chile. En palabras de Martita Molina, de la Dirección de Aeropuertos: “Este logro superó con creces los objetivos de sostenibilidad que se habían planteado, y a su vez, con la convicción de que estamos entregando una infraestructura aeroportuaria de primer nivel y con altos estándares de sostenibilidad en una zona extrema de nuestro país”​.

Conoce a los líderes en el desarrollo de arquitectura sustentable en los 10 años de CES

Crisosto Smith Ltda cuenta con la mayor cantidad de proyectos en CES, con 39 proyectos distribuidos en 13 regiones. Descubre su enfoque y el impacto de su trabajo en el país.

Desde el proyecto número 1 en CES, correspondiente a la Escuela Manuel Anabalón Sáez, diseñada por Gubbins Arquitectos y desde del primer proyecto certificado: el edificio de la Cámara Chilena de la Construcción de Osorno, diseñada por Scheel Arquitectos, han pasado más de 200 profesionales del diseño han usado la metodología de CES en sus diseños

Dentro del total, la firma con mayor cantidad es Crisosto Smith Ltda, con 39 proyectos distribuidos en 13 regiones del país. De esta manera, la firma se consolida como una de las oficinas con mayor presencia histórica en iniciativas precertificadas, certificadas o inscritas bajo la Certificación Edificio Sustentable (CES). Así, de acuerdo a la distribución por etapa de certificación, Crisosto Smith Ltda cuenta con 3 proyectos certificados, 30 precertificados y 6 aún en la etapa inicial de inscritos.

Los principales usos de los proyectos diseñados por Crisosto Smith Ltda son Oficinas (18), Educación (15), Salud (3), Cultura (2) y Seguridad (1).

Enfoque territorial y tipológico

Uno de los sellos distintivos del trabajo de Crisosto Smith Arquitectos ha sido su presencia desde el extremo norte (Arica y Parinacota) hasta Magallanes, abordando infraestructura pública en zonas urbanas, rurales y extremas. También destaca su rol en el desarrollo de edificios consistoriales, establecimientos educacionales y fiscalías, todos con altos estándares de eficiencia energética y confort ambiental.

Su trabajo ha contribuido no solo a mejorar la calidad del espacio público, sino también a descentralizar la arquitectura sustentable, apostando por soluciones adecuadas al contexto climático y sociocultural de cada zona.

En 2023, uno de los edificios diseñados por esta firma logró el tercer lugar de los Premios CES, con 61,5 puntos: el Edificio Consistorial de Chañaral.

En segundo lugar en cantidad se encuentra la oficina Arqdesign, con 26 proyectos CES en todo Chile, ha sido clave para consolidar la sostenibilidad en la arquitectura pública, especialmente en el ámbito educacional, donde ha desarrollado una gran cantidad de jardines infantiles, escuelas y liceos, además de edificios vinculados a la seguridad pública y oficinas.

Le sigue BIS Arquitectos, con 23, Arqlofts, con 20 y el quinto lugar lo tienen Prado Arquitectos y Valle Cornejo, ambos con 16, ANGO Arquitectura, con 13 y Bortink Yurisic Arquitectos, con 11 proyectos.

Esta consolidación demuestra el compromiso creciente de la arquitectura nacional con la sostenibilidad, no solo en el diseño, sino también en la implementación efectiva de estrategias para reducir la huella ambiental de los edificios de uso público en Chile.

¡Felicitamos a todos los equipos por este importante aporte al desarrollo de infraestructura sustentable en Chile!

Una década de impulso sustentable: evolución y liderazgo en CES

En 10 años, la Certificación Edificio Sustentable (CES) ha transformado el panorama de la construcción en Chile. Exploramos su evolución, los proyectos pioneros y las instituciones líderes que están marcando la pauta en arquitectura sustentable.

La Certificación Edificio Sustentable (CES) celebra una década de impacto transformador en la industria de la construcción en Chile. Desde su inicio a fines de 2014, CES ha promovido un cambio cultural y técnico, incentivando a mandantes públicos y privados a adoptar estándares más altos de sustentabilidad en sus proyectos.

La evolución de CES a lo largo de estos 10 años es evidente en el aumento constante de proyectos inscritos, precertificados y certificados. Los datos revelan un crecimiento significativo, con un salto notable en proyectos precertificados a partir de 2017 y un incremento sostenido en proyectos inscritos. Este aumento refleja un compromiso creciente con la construcción sustentable en el país.

Entre los hitos destacados, el terminal de pasajeros del Aeródromo Teniente Julio Gallardo en Puerto Natales obtuvo la precertificación CES con 90 puntos, el puntaje más alto en 10 años de certificación para esa categoría. Este proyecto, impulsado por la Dirección de Aeropuertos del Ministerio de Obras Públicas (DAP – MOP), se distingue por su enfoque en estrategias bioclimáticas, generación de energías renovables y un diseño integral.

Asimismo, Construcción Cuartel de Bomberos, Segunda Faja, Villarrica, es, hasta la fecha, el edificio con mayor puntaje (83,5). 

Además, oficinas de arquitectura como Crisosto Smith Ltda. lideran el desarrollo de arquitectura sustentable, con 39 proyectos CES distribuidos en 13 regiones del país. Su enfoque territorial y tipológico, abordando infraestructura pública en zonas urbanas, rurales y extremas, ha sido clave para descentralizar la arquitectura sustentable y adaptarla a diversos contextos climáticos y socioculturales. Otras oficinas como Arqdesign, BIS Arquitectos, Arqlofts, Prado Arquitectos, Valle Cornejo, ANGO Arquitectura y Bortink Yurisic Arquitectos también han contribuido significativamente al avance de la sostenibilidad en la arquitectura chilena.

En el ámbito territorial, la implementación de CES ha tenido un alcance nacional significativo, con proyectos distribuidos en todas las regiones de Chile. Destacan la Región Metropolitana con 98 proyectos y la Región de la Araucanía con 95, evidenciando un fuerte compromiso con la sostenibilidad en estas áreas. Otras regiones como el Biobío (49), Maule (47), Valparaíso (40) y Los Lagos (36) también muestran una actividad considerable. Incluso regiones más extremas como Arica y Parinacota (19), Tarapacá (12) y Magallanes y de la Antártica Chilena (22) han adoptado la certificación, demostrando que la preocupación por la construcción sustentable trasciende las particularidades geográficas y climáticas de cada zona.

En resumen, estos 10 años de CES han marcado un hito en la construcción sustentable en Chile. El compromiso de profesionales, instituciones y mandantes ha impulsado la creación de edificios más eficientes, confortables y respetuosos con el medioambiente. La celebración de esta década es un espacio para reconocer los logros alcanzados y proyectar un futuro aún más sustentable para la construcción en el país.

Un año de conmemoración y un futuro de oportunidades

Por Ricardo Fernández, presidente de CES

Hace más de una década, un grupo de visionarios impulsó la creación de un estándar que transformaría la forma en que concebimos y construimos nuestros edificios. Con el liderazgo del Ministerio de Obras Públicas, la Cámara Chilena de la Construcción, el Colegio de Arquitectos y el Instituto de la Construcción, a los que luego se sumaron el Ministerio de Energía y el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, y con la colaboración de múltiples instituciones, dimos vida a la Certificación Edificio Sustentable (CES). Hoy, miramos con orgullo el camino recorrido y los logros alcanzados.

Desde su implementación, CES ha impulsado un cambio cultural y técnico en la industria, motivando a mandantes públicos y privados a elevar los estándares de sustentabilidad en sus proyectos. Gracias a su compromiso, cientos de edificios en Chile han sido diseñados y construidos con criterios de eficiencia energética, confort y respeto por el medioambiente, mejorando así la calidad de vida de las personas y promoviendo una industria más responsable y competitiva.

Este año, celebramos la consolidación de nuestra Certificación CES y más de una década contribuyendo con un impacto positivo en la edificación de nuestro país. Conmemoramos el esfuerzo de quienes confiaron en CES como un aliado clave para mejorar sus edificaciones y agradecemos a cada profesional, institución y organismo que ha hecho posible este avance. Pero no nos detenemos aquí. Nos enfrentamos a nuevos desafíos y oportunidades, y seguimos comprometidos en la evolución de nuestra certificación para adaptarnos a los cambios tecnológicos, normativos y ambientales que el mundo exige.

Queremos que esta celebración sea un espacio de encuentro, reflexión e inspiración. Durante los próximos meses, desarrollaremos diversas actividades para compartir experiencias, reconocer los avances y proyectar juntos el futuro de la construcción sustentable en Chile. Invitamos a todos quienes han sido parte de este camino a sumarse y, sobre todo, extendemos una invitación especial a nuevos mandantes para que sean protagonistas del cambio.

Construir sustentabilidad no es solo una meta, es un compromiso con el presente y el futuro. 

Sigamos avanzando juntos.

A 10 años de CES y Construye2025

Por Marcos Brito, gerente de Construye2025 y director ejecutivo (interino) del Instituto de la Construcción

Hace una década, hablar de construcción sustentable en Chile era casi una visión utópica. El concepto, aunque prometedor, enfrentaba barreras culturales, tecnológicas y económicas que lo mantenían distante de la realidad cotidiana de la industria. Sin embargo, 10 años después, los avances en sustentabilidad demuestran que Chile no solo ha avanzado, sino que lidera iniciativas clave en la región.

En Construye2025, hemos sido testigos y partícipes de una transformación que, más allá de la adopción de nuevas tecnologías, refleja un cambio cultural profundo. Hoy, la construcción sustentable ya no es una opción, sino una necesidad frente a los desafíos climáticos y sociales. Este proceso, impulsado por actores públicos, privados y académicos, ha sentado las bases para una industria más eficiente, responsable y resiliente.

Hitos de una transformación necesaria

Uno de los avances más significativos ha sido la implementación de prácticas de economía circular en el sector. La construcción, que históricamente ha sido responsable de un alto porcentaje de emisiones de carbono y generación de residuos, hoy adopta soluciones innovadoras para minimizar su impacto. Desde el reciclaje de materiales hasta la industrialización de procesos, cada paso nos acerca a un modelo más sostenible.

La Hoja de Ruta para la Gestión Sustentable de Residuos de Construcción y Demolición (RCD), desarrollada por Construye2025, el MOP, Minvu, MMA y Corfo, ha sido un pilar clave en este proceso. Este documento estratégico establece metas claras para reducir, reutilizar y reciclar los desechos (recursos) generados en las obras, promoviendo un cambio estructural en la forma de construir en el país. Su implementación no solo ayuda a mitigar el impacto ambiental del sector, sino que también genera oportunidades para la creación de nuevos mercados y empleos relacionados con la economía circular. Junto con ésta, la Estrategia de Economía Circular en Construcción, lograda en conjunto con la CChC y el Instituto de la Construcción, sienta un precedente de voluntad colaborativa..

Asimismo, otro importante avance ha venido de la mano de mejorar el estándar de construcción, donde el desarrollo de certificaciones como la Certificación Edificio Sustentable (CES) ha sido fundamental para elevar los estándares de calidad ambiental y eficiencia energética en las edificaciones chilenas. La CES, diseñada específicamente para responder a las necesidades locales, se ha convertido en una herramienta poderosa para impulsar proyectos que prioricen el ahorro energético, la reducción de emisiones y el confort de sus ocupantes. Desde edificios públicos hasta desarrollos privados, esta certificación ha demostrado que construir de manera sustentable es no solo viable, sino también beneficioso a largo plazo.

CES, junto con otras iniciativas, refleja cómo Chile ha tomado la delantera en la promoción de construcciones que responden a las necesidades del presente sin comprometer el futuro. Estas certificaciones no solo son una herramienta técnica, sino también un vehículo para educar y sensibilizar a la industria y a la sociedad sobre la importancia de construir con un enfoque sustentable.

Además, el avance en tecnologías digitales, como el uso de BIM (Building Information Modeling), ha revolucionado la manera en que planificamos y ejecutamos las obras, permitiendo optimizar recursos y reducir el desperdicio. A esto se suma un trabajo continuo en el fortalecimiento del capital humano, donde programas de capacitación han preparado a miles de profesionales para enfrentar los desafíos que plantea esta transición hacia una construcción más verde y tecnologizada.

Desafíos hacia el futuro

A pesar de los avances, el camino hacia una construcción completamente sustentable (carbono neutral) sigue presentando retos. Es crucial acelerar los cambios regulatorios que permitan un despliegue masivo de soluciones sustentables, así como fomentar la inversión en innovación y tecnología. Además, debemos garantizar que este progreso sea transversal, beneficiando no solo a grandes empresas, sino también a pequeñas y medianas constructoras y empresas proveedoras.

En este contexto, la coordinación entre el sector público, privado y académico se vuelve indispensable. Desde Construye2025, hemos comprobado que mediante la colaboración y la articulación público-privada-académica es posible superar las barreras y garantizar que los beneficios de este progreso alcancen a todos los sectores de la sociedad.

Hoy, al mirar hacia atrás, podemos afirmar que los últimos 10 años han sido un período de aprendizaje, colaboración y crecimiento para el sector de la construcción en Chile. Pero también es el inicio de un desafío mayor: consolidar estos avances y proyectarlos hacia un futuro aún más ambicioso.

Invito a todos los actores de la industria a redoblar esfuerzos en torno a iniciativas como la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción y la certificación CES, que son símbolos del compromiso país con la construcción sustentable. Porque el desarrollo sustentable no es un destino, sino un camino que debemos recorrer unidos, construyendo juntos un Chile más sostenible, más productivo y más equitativo.

Avances en CES+Resiliencia: una apuesta por la infraestructura crítica del futuro

Hernán Madrid, jefe de CES, detalla los avances en el desarrollo de la versión CES+Resiliencia, una herramienta innovadora enfocada en mitigar riesgos sísmicos, de cambio climático y otras amenazas de la naturaleza en infraestructura crítica.

La Certificación Edificio Sustentable (CES) continúa evolucionando para abordar los desafíos del cambio climático y los riesgos naturales. En 2024, se formaron Comités técnicos de trabajo liderados por CES, los que avanzaron en el desarrollo de la versión CES+Resiliencia, centrada en garantizar la seguridad y sostenibilidad de la infraestructura crítica en escenarios extremos.

“El avance principal estuvo en los comités técnicos de riesgo sísmico y cambio climático, dos de los seis grandes temas que abordará esta versión”, explica Hernán Madrid, jefe de CES, destacando la complejidad y relevancia de esta iniciativa.

Riesgo sísmico: más allá de la estructura

Uno de los hitos fue la definición de metodologías para evaluar el desempeño estructural por desempeño frente a sismos. “Incorporaremos el concepto de diseño sísmico por desempeño, de forma de tener niveles de respuesta mayores al reglamentario en los edificios categorizados como infraestructura crítica. De este diseño surge como consecuencia el uso de estrategias como la incorporación de aislación o disipación sísmica en los edificios. Además, trabajamos en requerimientos para sistemas no estructurales, como sistemas, cielos falsos, elementos de protección solar, entre otros, considerando normativas específicas que no son de uso obligatorio actualmente en Chile”, detalla. 

Estas medidas buscan incorporar metodologías y estándares más elevados a proyectos considerados infraestructura crítica, como hospitales y centros de emergencia, asegurando su funcionalidad, incluso inmediata en el nivel mayor, tras un evento sísmico.

Cambio climático: preparación para el futuro

Otro avance clave fue la incorporación de proyecciones climáticas basadas en escenarios de cambio climático al análisis de confort térmico, demanda y consumo energético en edificios. “Gracias al apoyo de Alexis Perez, académico de la USS, contamos con archivos climáticos proyectados para 2050 y 2080, lo que nos permite evaluar el comportamiento de los edificios bajo escenarios de cambio climático. Esto es esencial para anticiparnos al aumento de temperaturas máximas y la variabilidad climática”, comenta Madrid.

Sin embargo, aún quedan desafíos por abordar, como el estudio de lluvias concentradas, cuya investigación está pendiente de financiamiento.

La versión CES+Resiliencia también planea abarcar riesgos volcánicos, incendios forestales, inundaciones y vientos extremos. En 2025, se espera avanzar en al menos dos de estas áreas, mientras se inician proyectos piloto con los requerimientos desarrollados en sismos y cambio climático.

“Nuestro objetivo es aplicar estas medidas a infraestructura crítica, asegurando que cumpla con los estándares más altos de resiliencia y sostenibilidad”, enfatiza el profesional.

Con esta versión, CES no solo responde a las necesidades actuales, sino que también anticipa soluciones para un futuro más seguro y sostenible, posicionándose como un referente en la certificación de edificios preparados para enfrentar los desafíos del siglo XXI.

Sacyr: la sustentabilidad es clave para abordar el uso eficiente de los recursos

La empresa Sacyr Ingeniería e Infraestructuras recibió el Premio CES 2024 a la Empresa Destacada. Este reconocimiento refleja su compromiso con la sostenibilidad y la innovación en proyectos de gran escala, marcando un precedente en la industria de la construcción en Chile.

La sustentabilidad es un eje esencial en los proyectos de infraestructura moderna, y Sacyr Ingeniería e Infraestructuras lo ha demostrado al ser galardonada con el Premio CES 2024 a la Empresa Destacada. Isabel Barba, gerente de Calidad y Medio Ambiente, atribuye este logro al trabajo incansable de los equipos de Sacyr, los que integran prácticas sostenibles en cada etapa de sus proyectos.

“Este reconocimiento nos enorgullece como compañía, ya que refleja nuestro compromiso con la sustentabilidad en la industria de la construcción, alineado con los pilares del Grupo Sacyr”, comenta la ejecutiva, al referirse al impacto de este premio en la organización.

De hecho, en Chile, son la primera obra y empresa en obtener la certificación AENOR “Residuo Cero”, “lo que acredita que una de nuestras obras, la construcción del Hospital Sótero del Río, valoriza más del 90% de los residuos, evitando así la disposición final en vertedero, promoviendo la economía circular en la obra”, explica.

Y agrega que “nuestro objetivo es recuperar y valorizar la mayor cantidad de residuos posible, promoviendo la economía circular en todas nuestras obras. En algunos casos, como el material de excavación, logramos reutilizar hasta el 100% para elaborar hormigones y rellenos estructurales”.

Durante estos años, han sabido enfrentar los requerimientos de CES, como “un desafío importante que afrontamos con la responsabilidad que eso conlleva”, asegura. Como explica, este desafío se extiende en las etapas de diseño y durante la construcción, donde van apareciendo nuevos requerimientos y materiales más sostenibles.

A la vanguardia en construcción

A su haber, Sacyr también cuenta con los Hospitales Buin-Paine, Sótero del Río y Provincia Cordillera, que están en proceso de certificación CES. Por otra parte, lidera la transición hacia la construcción industrializada mediante su nueva planta de prefabricados. En esta instalación, la empresa produce baños modulares de alto estándar que garantizan calidad, eficiencia y control de costos.

“Actualmente, ofrecemos 30 tipos de baños modulares para proyectos, como los hospitales Buin-Paine, Sótero del Río y Provincia Cordillera. Este enfoque marcará una diferencia significativa en el sector salud y se extenderá a otras industrias”, asegura Isabel Barba.

Asimismo, la construcción del Hospital Sótero del Río ha sido un laboratorio de innovación en la reducción de la huella de carbono. Según Barba, el proyecto logró disminuir las emisiones de 508 a 465 kgCO₂/m², “cifra que resulta muy importante si realizamos una comparación internacional, donde el estándar inglés del National Health Service of London (NHS), la aplicación de las medidas que llevamos a cabo permitiría lograr una intensidad de emisiones bajo el escenario de ‘Diseño Ejemplar’”, plantea.

Las diferentes acciones medioambientales que se ejecutan en esta construcción han permitido reducir en más de 11.510 los viajes a los botaderos y en más de 85.093 los viajes de camiones mixer a obra desde hormigonera más cercana, disminuyendo en 153.002 los kilómetros en transportes y más de 320.270 menos litros de combustible consumidos. “En otras circunstancias, debiesen realizar los viajes a botaderos y plantas de abastecimiento. El objetivo es lograr que un proyecto como este, de enorme tamaño, tenga una baja afección hacia el medioambiente”, analiza. 

Y como “en Sacyr creemos que la construcción sustentable es clave para abordar los desafíos globales relacionados con el cambio climático y el uso eficiente de los recursos, desarrollamos proyectos que prioricen la eficiencia energética, la disminución del uso de agua potable, y la gestión responsable de residuos, logrando altas tasas de reciclaje y reutilización.

Además, “la colaboración con socios, proveedores y comunidades será esencial para cumplir con los más altos estándares de sostenibilidad y contribuir al bienestar de las personas y el entorno”, concluye.

La Dirección de Aeropuertos avanza en el camino hacia la sustentabilidad

La Dirección Nacional de Aeropuertos (DAP) recibió el Premio CES 2024 a la Política Pública Destacada por su compromiso con la sustentabilidad en infraestructura aeroportuaria. Claudia Silva Paredes, su directora, destaca los avances logrados, como la precertificación CES en proyectos clave y la creación de la versión CES Aeropuertos, un estándar pionero que posicionará a Chile como referente en la materia.

La sustentabilidad es un desafío transversal que toca todas las áreas de la infraestructura pública, y los aeropuertos no son la excepción. En reconocimiento a sus esfuerzos por integrar prácticas sostenibles en sus proyectos, la Dirección Nacional de Aeropuertos (DAP), liderada por Claudia Silva Paredes, recibió el Premio CES 2024 a la Política Pública Destacada. Este galardón resalta su compromiso con el diseño de infraestructura aeroportuaria más eficiente y responsable con el medioambiente.

“Fue un gran orgullo y satisfacción recibir este reconocimiento. No lo esperábamos, pero lo sentimos como un aliciente para seguir trabajando en alcanzar altos estándares de sustentabilidad en nuestros aeropuertos”, afirma Claudia Silva Paredes. Desde la DAP, destacan que este logro refleja una labor constante por desarrollar proyectos que, además de cumplir con las necesidades operativas, consideren su impacto ambiental.

Entre los hitos de la DAP en esta materia, sobresale la implementación de estándares CES en el diseño de 12 terminales de pasajeros desde el año 2020. De hecho, en 2024 lograron su primera precertificación CES con el refugio de pasajeros del aeródromo Teniente Marsh en la Antártica Chilena, que alcanzó una categoría Sobresaliente con 86,5 puntos.

Una apuesta para el futuro

Uno de los grandes avances en sostenibilidad impulsados por la DAP es el desarrollo de un estándar de certificación específico para infraestructura aeroportuaria, denominado CES Aeropuertos. Esta herramienta, que se espera implementar en 2025, será pionera a nivel nacional y posicionará a Chile a la vanguardia en la planificación y ejecución de proyectos aeroportuarios.

“Nos dimos cuenta de que la herramienta CES actual no aborda todas las particularidades de los aeropuertos, como la reducción de huella de carbono, economía circular o electromovilidad”, explica Silva. “Por ello, junto con el equipo CES, decidimos desarrollar un estándar específico que asegure que todos los futuros proyectos aeroportuarios sean sostenibles”, cuenta.

La implementación de esta nueva herramienta no ha estado exenta de desafíos. Por ello, los proyectos piloto en Teniente Marsh y Puerto Natales han sido fundamentales para definir los futuros estándares del CES de Aeropuertos. “En el caso de Teniente Marsh, cumplir con las exigencias del Tratado Antártico, que exige no dejar residuo alguno, fue un reto importante. En Puerto Natales, quisimos que el terminal reflejara su papel como puerta de entrada a Torres del Paine, considerando altos estándares de sustentabilidad”, detalla la directora.

Ambos proyectos han requerido identificar excepciones dentro de la actual certificación CES para ajustarse a las particularidades de la infraestructura aeroportuaria. Sin embargo, estas experiencias han resultado enriquecedoras y claves para el desarrollo de este nuevo estándar.

Sustentabilidad como eje estratégico

La sustentabilidad no solo es un objetivo, sino un eje estratégico en la planificación de la DAP. Según Claudia Silva, el crecimiento de los aeropuertos debe planificarse con una mirada de largo plazo. “Estamos pensando en terminales que puedan satisfacer la demanda en 40 o 50 años, incorporando eficiencia energética, materiales sostenibles y soluciones que minimicen su impacto ambiental”, comenta.

A través de sus proyectos y colaboración con CES, la Dirección Nacional de Aeropuertos no solo está transformando la infraestructura aeroportuaria en Chile, sino que también establece un ejemplo de cómo la sostenibilidad puede integrarse como un pilar en las políticas públicas.

Con iniciativas como CES Aeropuertos, Chile lidera el camino hacia una infraestructura más verde, eficiente y alineada con los desafíos globales del cambio climático.

2024, un año de récords y crecimiento para CES

El 2024 marcó un hito histórico para CES con un número récord de proyectos inscritos y precertificados, consolidando su rol como referente en la sustentabilidad de edificios de uso público en Chile. A continuación, un balance de los logros y desafíos del año.

El 2024 será recordado como un año excepcional para la Certificación Edificio Sustentable (CES). Durante este período, se inscribieron 93 proyectos, de los cuales 63 obtuvieron precertificación y 24 fueron certificados, cifras que posicionan al año como el más exitoso en la historia de CES, en términos de inscripción y precertificación de proyectos​.

De esta manera, los principales logros del año fueron la ampliación de la base de mandantes, sumando a importantes instituciones como la Dirección de Aeropuertos del MOP, la Universidad Tecnológica Metropolitana y varias municipalidades, entre las que destacan Pudahuel, Colbún y Vitacura. Además, la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) certificó un proyecto e inscribió otros 25, destacándose como el segundo mandante más activo después de la Dirección de Arquitectura del MOP​.

Por primera vez, se precertificó un proyecto bajo la versión piloto para edificios existentes, representando un avance significativo en la evaluación de edificaciones ya construidas. Asimismo, se incorporaron cinco hospitales y dos aeropuertos para estos usos, demostrando la adaptabilidad y crecimiento de CES en diferentes sectores​.

“El puntaje más alto alcanzado este año en proyectos precertificados fue de 87,5 puntos, mientras que en certificados fue de 73,5, reflejando un compromiso continuo con la excelencia y el cumplimiento de altos estándares de sustentabilidad​”, señala Romy Luckeheide, arquitecta en CES.

Tendencias y evolución en una década

A juicio de la profesional, “el crecimiento en el número de proyectos inscritos y precertificados confirma la relevancia de CES en la construcción sustentable en Chile. Desde su inicio en 2014, CES ha evolucionado para integrar nuevas versiones y sectores, consolidando su metodología como un estándar nacional​”.

A pesar de los logros, CES enfrenta el reto de continuar promoviendo la sustentabilidad en sectores emergentes y consolidar su presencia en edificaciones existentes. La incorporación de nuevas versiones y mandantes será clave para mantener el dinamismo alcanzado en 2024.

El 2024 fue un año de consolidación y expansión para CES. Los resultados obtenidos no solo reflejan el trabajo colaborativo entre instituciones y profesionales, sino que también abren el camino para nuevos desafíos y oportunidades en el ámbito de la construcción sustentable en Chile.

CES trabaja para equiparar el sistema con los cambios a la Reglamentación Térmica 

A través de especialistas del Comité Directivo, las Entidades Evaluadores y Asesores CES, se inició el trabajo que le permitirá adecuar los requerimientos a la actualización de la Reglamentación Térmica, que será obligatoria a partir del próximo año.

La actualización de la Reglamentación Térmica ha traído una serie de modificaciones en distintos ámbitos. De hecho, el equipo de Certificación Edificio Sustentable ya trabaja en un Comité Técnico que “responde a la necesidad de revisar, evaluar e incorporar los impactos que tiene la actualización de la ordenanza en los aspectos de la reglamentación térmica, que incluye un alcance para edificios de uso educación, salud y hoteles”, según cuenta Hernán Madrid, jefe de CES.

A esta instancia están convocados actores de distintas instituciones relevantes. Por ejemplo, desde el Comité Directivo CES, han estado participando la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, el Colegio de Arquitectos, y desde los Comités Consultivos, los ministerios de Salud, Educación, Desarrollo Social y el ChileGBC más la Dirección de Aeropuertos del MOP, representantes de las Entidades Evaluadoras activas y asesores CES. 

“Hemos tenido entre 20 y 25 participantes en cada sesión y prevemos que este comité será acotado en su desarrollo, porque tiene que abordar aspectos específicos, y una vez que se cubra eso, el Comité termina su función al entregar los lineamientos y los ajustes de los requerimientos que tendremos en virtud de la Ordenanza de Urbanismo y Construcciones (OGUC) que entra en vigor el próximo año”, comenta Madrid.

Así, se han detectado diferencias en puntos como la zonificación térmica, el requerimiento mínimo para la envolvente, ventilaciones, condensación e infiltración de aire, elementos que requieren ser ajustados dentro del modelo de certificación, para que esté en sintonía con la nueva reglamentación térmica que se incluye en la OGUC.

“Dentro de los objetivos principales ha sido poder acordar con el comité técnico qué haremos con respecto a un primer punto que es la zonificación térmica y/o climática que usamos actualmente en CES. Un segundo punto es respecto a los requerimientos mínimos de la envolvente, que será una exigencia sólo para salud, educación y hoteles, y si eso es o no extensible a otros usos de edificios que se están actualmente certificando. Un tercer punto es las condiciones de ventilación que se incorporan, un cuarto punto está asociado a las condiciones de evaluación de condensación y un quinto punto está relacionado con infiltración de aire, que será uno de los cambios más importantes del sistema de certificación para adecuarse a lo que exigirá la ordenanza”, explica el ingeniero.

Hasta el momento, el Comité ha tenido cinco sesiones, y los principales acuerdos han sido: primero, respecto a la zonificación térmica versus climática, con el acuerdo de cambiar el uso de todos los sistemas de certificación de las actuales zonas climáticas a las zonas térmicas. “Esto es un acuerdo preliminar, porque Ministerio de Obras Públicas pidió la opción de presentar algún estudio adicional que permita reevaluar la consideración de las zonas climáticas, pero en principio el acuerdo es que lo cambien a las zonas térmicas”, añade Madrid.

Y un segundo acuerdo tiene que ver con el requerimiento mínimo obligatorio que la Ordenanza establece para la envolvente de los edificios, que aplica únicamente a salud, educación y hoteles. “En ese sentido, el acuerdo ha sido que hagamos extensivos los requerimientos a todos los usos de edificios, considerando que, por supuesto salud, educación y hoteles es obligatorio, y para los otros usos que no es obligatorio, la exigencia se transforme en que usemos esos valores de referencia para el modelo de simulación dinámica de demanda, consumo de energía y también confort térmico pasivo, y el requerimiento obligatorio sea una pequeña reducción respecto a ese modelo con esas condiciones, y la estructura del requerimiento que se mantenga igual a la que tenemos hasta al día de hoy. Esos niveles, vamos a tener que ajustarlos y, probablemente, tengamos que hacer un estudio para definirlos”, comenta el jefe de CES.

En términos de condensación, el acuerdo fue en que ésta será la mínima reglamentaria para salud, educación y hoteles, que solicitará la Ordenanza, pero también hacerlo extensible para cualquier tipo de edificio que tenga aislación por el interior y para el caso de uso deportes y, particularmente, en el caso de las piscinas temperadas. 

De esta manera, se espera que este comité técnico finalice a más tardar en enero de 2025.